Fuerte interna en el Colegio de Abogados por la caída de prestación clave

Un sorpresivo comunicado de la comisión directivos del Colegio de Abogados de Rosario (Colabro) dando cuenta de la no apertura de la inscripción 2025 del Jardín de Infantes de la entidad, sumado de la decisión del cierre del espacio a partir del 31 de diciembre de este año, generó enojo de un grupo de padres, cuyos niños asisten a la institución y tenían pautado continuar el ciclo lectivo del año entrante. El caso derivó en fuertes planteos contra la actual conducción del colegio profesional y obligó a la presidencia a defenderse de las acusaciones.

“El Colegio De Abogados vive un año entero con el déficit que genera el jardín de infantes”, expuso Lucas Galdeano, titular de la 2da Circunscripción de la institución, al ser consultado por Punto biz respecto de la definición de bajar las persianas. “El colegio tiene un componente salarial que es prácticamente el 70% de la recaudación mensual, luego tiene gastos de alquileres, de funcionamiento de distintas áreas como el consultorio jurídico. Yo no digo que ese sea el motivo de la decisión de cierre, pero de contar con los gastos del jardín, el colegio perfectamente tendría activos para funcionar un año y hasta se podría reducir un 10% la cuota”, amplió el abogado, para sostener la clausura de la prestación.

Los dichos de Galdeano fueron ampliatorios del comunicado que de la noche a la mañana sorprendió a los colegiados. “Tras un debate en el seno del Directorio, se ha decidido no abrir la inscripción para el ciclo lectivo 2025 y proceder con el cierre definitivo del jardín el 31 de diciembre de 2024”, esgrimió la institución, para sumar que el Colegio “se compromete a facilitar el proceso de transición en caso de que alguna tercera institución esté interesada en continuar con la gestión del Jardín. De ser así, pondremos a disposición todos nuestros recursos para facilitar el traspaso del fondo de comercio”.

Ahora bien, al margen de los fundamentos esgrimidos por la comisión directiva, hay colegiados que estallaron ante la decisión a la que calificaron de “intempestiva”. “Acá se firmó para todos los padres del ciclo lectivo 2025 un contrato de enseñanza privada. Esto nos perjudicó porque no tuvimos la opción de buscar otro jardín. En consecuencia, hay muchos colegiados que ya están actuando individualmente. También es mi caso”, indicó el abogado Hugo Michelotti, quien insistió en la figura del “incumplimiento contractual” por parte de la conducción del jardín de infantes.

Frente a las acusaciones, Galdeano se defendió manifestando que la inserción 2025 no se habilitó ya que “estaba estipulado que la apertura se diera a partir de septiembre, mes en el que finalmente se definió el cierre del jardín”.

Vale aclarar que el estatuto fundacionales del Colegio de Abogados no establece la creación de un jardín, elemento del que Galdeano se aferra para justificar la decisión de la comisión directiva que, de acuerdo al presidente de la entidad “se hizo a derecho”.

“Hoy lo traigo a Elon Musk para controlar las pérdidas del jardín y no podría hacerlo”, mencionó Galdeano para graficar que “el problema del jardín es que en sí mismo está pensado para 63 hijos de abogados que hoy no están”. De acuerdo a los propios padres, a la institución concurren menos de 40 niños, una matrícula que descendió a partir de la vigencia del teletrabajo que posibilita que cada vez menos letrados concurran a los Tribunales de Balcarce y Pellegrini, en cuyas adyacencias está emplazado el jardín.

“Hay 63 plazas para hijos abogados, que por las contingencias del país generan una enorme erogación de parte de los 10.000 matriculados solamente para sostener el jardín. Eso es lo que nosotros interpretamos que no podía continuar”, sumó Galdeano.

La decisión parece estar tomada y frente a ello, un grupo de padres convocó a una movilización en defensa del jardín. La concentración será en la puerta del establecimiento ubicado en Balcarce 1559 este viernes a las 11 de la mañana.