Del Swift a conquistar Chicago con la carne argentina

Los Di Sapio están ligados a la carne desde siempre. Originarios de Alcorta, Rodolfo fue operario del frigorífico Swift y supo administrar su propia carnicería antes de partir en 1976 con rumbo a Estados Unidos. Se radicó en Chicago, abrió una carnicería y tres años más tarde llevó a su esposo y a su hijo Sergio. Cuatro décadas después, Sergio se convirtió en noticia por haber sido el primero en volver a importar carne argentina al territorio estadounidense. 

A sus 46 años, hoy es propietario de tres restaurantes, un bar y una carnicería llamada Mercado Food Mart. Además de los cortes argentinos tradicionales, en el Mercado Food Mart se elaboran chorizos y morcillas con sello nacional, empanadas, y hasta se puede encontrar yerba, vinos y dulce de leche. 

A los 20 Sergio ya había acumulado suficiente dinero como para abrir su primer establecimiento gastronómico. Junto a su padre ideó un plan de negocios para establecer Tango Sur, un restaurante argentino tradicional que sirve un menú simple de parrilladas, costillas, carnes y empanadas. Continuó expandiéndose y para 2023 inauguró tres ubicaciones más: Bodega Sur, un lugar informal de vinos y cervezas; Barra Ñ, un salón que sirve comida, cócteles exclusivos y presenta música en vivo; y Folklore, asador y bar. 

“Si bien los norteamericanos están acostumbrados a consumir cortes como el bife angosto, el ancho y el lomo, en nuestra carnicería ofrecemos todos los cortes para los latinos que vienen a buscarlos y saben cómo cocinarlos. Además, aprovechamos toda la carne porque hacemos chorizos, morcillas y empanadas; no hay desperdicios”, sostuvo Sergio. El negocio se fue construyendo lentamente e invirtió primero en bienes raíces para evitar el pago de un alquiler. Al ser propietario de los edificios, hace también una diferencia arrendando los departamentos de los pisos superiores. 

Con un quinto restaurante en construcción, Di Sapio apuesta a generar lugares de encuentro, donde las personas puedan reunirse y pasar un buen rato mientras disfrutan de una comida auténtica y con ADN local. En la carnicería ya venían vendiendo “cortes del tipo argentino”, pero con carne que provenía de animales de Estados Unidos. En 2019 el círculo se cerró y desde entonces los clientes pueden comprar auténtica carne de las pampas.