Cuánto cuesta vacacionar y por qué las familias ajustan el plan

La llegada del verano 2026 encuentra a las familias argentinas afinando el lápiz antes de definir las vacaciones. La suba de precios, los cambios en el tipo de cambio y un mayor cuidado del gasto empujan una tendencia clara: más escapadas breves, menos viajes largos y una fuerte inclinación por destinos de cercanía.

Un relevamiento exclusivo de la consultora Focus Market muestra que los costos vinculados a la temporada estival registran aumentos moderados en promedio, aunque con brechas cada vez más marcadas entre vacacionar dentro del país o cruzar la frontera.

“De cara al verano 2026 observamos un crecimiento sostenido del interés por escapadas cortas y viajes de fin de semana. En un contexto de mayor cautela, los hogares priorizan experiencias más frecuentes pero de menor duración, lo que fortalece el turismo interno”, explicó Damián Di Pace, director de Focus Market.

Vacaciones locales vs. exterior: la brecha se amplía

El informe toma como referencia una familia tipo —dos adultos y dos menores— que viaja durante 15 días, con vuelo y hotel 3 estrellas con desayuno incluido, en los destinos más elegidos.

Entre las opciones nacionales, Mar del Plata lidera el ranking con un costo estimado de $5.121.156, apenas un 4% más que el verano anterior. Bariloche aparece en segundo lugar, con un presupuesto de $7.693.084 y una suba interanual del 28%. Mendoza, que se suma este año al análisis, presenta una alternativa más accesible, con un gasto cercano a $3.610.467.

En el plano internacional, los números son más exigentes. Vacacionar en Río de Janeiro implica un desembolso total de $8.412.283, con un incremento del 6%, explicado principalmente por el fuerte aumento en los pasajes aéreos. Punta del Este, en cambio, muestra una suba mucho más pronunciada: el costo total asciende a $10.978.158, un 32% más que en 2024, impulsado por el encarecimiento de la hotelería. Santiago de Chile completa el listado, con un gasto estimado de $7.362.873 para la quincena.

Según Focus Market, este escenario responde en gran medida a la evolución cambiaria. Durante 2025, el peso argentino se depreció 36,97%, mientras que monedas regionales como el real brasileño, el peso chileno y el mexicano se apreciaron entre 7% y 13%.

Esa combinación encareció los consumos en el exterior: los precios en pesos de productos típicos en Brasil subieron 63% en el último año; en Chile, el alza llega al 52%, y en México ronda el 44%.

“La depreciación del peso frente al dólar, sumada a la apreciación de monedas clave para el turismo regional, redujo la competitividad de los destinos externos para el público argentino”, señaló Di Pace.

Con ese telón de fondo, el turismo de proximidad gana terreno como opción más accesible. Una escapada de 4 días y 3 noches en Pilar, con micro y hotel con amenities, cuesta en promedio $612.091. En Luján, el valor asciende a $757.764, mientras que en San Andrés de Giles ronda los $1.018.649.

La canasta de verano, con subas contenidas

El estudio también analizó una canasta de 33 productos básicos para la temporada, con un costo total de $984.319, lo que representa un aumento interanual del 12%. Si bien se trata de una suba moderada, el comportamiento de los precios es dispar.

Entre los mayores incrementos aparecen el traje de baño para mujer (+48%), las gorras infantiles (+43%) y las cremas hidratantes (+43%). En sentido contrario, bajaron los inflables para agua (-32%), los toallones (-13%) y los insecticidas en aerosol (-10%).