Vienen de inaugurar planta y ya tienen en carpeta una ampliación

Ante la imposibilidad de crecer en superficie en su anterior ubicación (el macrocentro rosarino) y con el objetivo de ampliar la capacidad productiva, Mervak cortó cintas de su nueva planta en el Micro Parque Industrial de Alvear. Lo cierto es que a poco de presentar en sociedad el buque insignia de 1.200 m2 -un proyecto se demoró más de la cuenta-, ya tienen en carpeta una ampliación. 

“Son dos lotes y en el lindero la idea es empezar a construir la otra planta este año para terminarla en 2025. En realidad, ya estamos con obras menores que tienen que ver con biodigestores para residuos”, refirió a Punto biz Edgardo Chiacchiera, socio gerente de la firma especializada en el desarrollo de productos para medicina veterinaria. La nueva nave tendrá en total 1.700 m2 divididos en dos pisos: 850 m2 arriba y 850 m2 abajo. 

Mervak tiene actualmente en cartera alrededor de 40 productos veterinarios entre comprimidos, orales y polvos (marca propia y elaboran también para terceros), y hay al menos otros cinco en fase de desarrollo. El plan -según explicó el ejecutivo- es sustituir importaciones -porque algunos productos los ingresan laboratorios multinacionales- y salir al ruedo con otros novedosos que hoy no están en el mercado local. “Como pensamos agrandar la línea de productos, vamos a necesitar más espacio”, apuntó Chiacchiera. 

Entre las proyecciones de la empresa -que cambió la razón social a Mervak SRL- está también exportar; hoy todo lo que producen se vuelca al mercado doméstico. De hecho, ya presentaron expedientes en Bolivia y tienen contacto con Paraguay, Ecuador, Costa Rica, Angola y Países Árabes para hacer base en esas naciones. “No exportamos porque cambiamos la razón social y estamos con los registros en Senasa”, apuntó. 

Con el objetivo de abrir mercados, Mervak forma parte del programa de Primeros Exportadores de la Municipalidad y del programa In Company de la Provincia. 

Como la flamante planta genera residuos que no pueden desechar a la calle, tuvieron que construir un biodigestor -una obra menor en comparación a la proyectada-, pero que implicó un desembolso económico considerable. En el medio, hicieron algunas modificaciones a la nave primaria para ampliar procesos productivos e incorporaron máquinas nuevas: cuentan con tres líneas de producción de medicamentos, depósitos, administración y servicios.