Reconocida láctea santafesina mantiene sus tres plantas paralizadas

La empresa láctea Verónica atraviesa una grave situación económica que impacta de lleno sobre su personal y su cadena productiva. Con plantas en Lehmann, Totoras y Suardi, la firma enfrenta atrasos salariales, caída drástica en la recepción de materia prima y una deuda financiera superior a los $9.000 millones.

Verónica pasó de procesar un millón de litros diarios en todas las plantas a no llegar ni a 200 mil. La ruptura con los tambos proveedores por falta de pago provocó una parálisis en la cadena de producción.

En paralelo, los trabajadores informaron que solo recibieron un tercio de sus salarios del último mes. Frente a esta situación, iniciaron una medida de fuerza bajo la figura de retención de crédito laboral. “Queremos dejar en claro que no estamos bloqueando la planta, estamos reclamando lo que nos corresponde”, aclararon.

La compañía acumula una deuda financiera de $9.224 millones, con compromisos mensuales por casi $288 millones, según un reporte de la consultora Nosis. En marzo, el rechazo de cheques por más de $460 millones encendió nuevas alarmas sobre su situación contable.

Ante el avance del conflicto, el Ministerio de Trabajo de Santa Fe convocó una audiencia para este miércoles en Rosario entre la empresa y los representantes sindicales. Se espera que este encuentro pueda dar lugar a acuerdos que aporten claridad o compromisos formales para garantizar los puestos de trabajo.

Desde la empresa, aseguran estar haciendo esfuerzos por normalizar los pagos y recomponer la relación con los proveedores, aunque no ofrecieron plazos ni detalles sobre cómo lo harán.