Dan de baja a polémica licitación de guardería náutica

El Ente Administrador del Puerto de Rosario (Enapro) le dio de baja a la licitación de una guardería náutica ubicada en el extremo sur del complejo portuario cuyo trámite durante la gestión de Ángel Elías levantó mucha polémica por las desprolijidades administrativas detectadas por la actual conducción.

La empresa GPS tenía un permiso de uso de la guardería, ubicada en El Mangrullo 5095, que –tras ser renovada anteriormente- venció en julio de 2019. La guardería tiene en la actualidad unas 400 embarcaciones y 8 empleados.

Ese mismo mes, y con la empresa manteniendo la operatoria, el Enapro llamó a licitación realizándose la apertura de sobres con las propuestas en agosto pasado. Para competir por el negocio, además de GPS se presentó una empresa vinculada a la familia Gerbasi, con recorrido en el negocio de la logística y los muelles.

Si bien antes de fin de año hubo un aviso del Enapro a la firma de los Gerbasi de que su propuesta había sido la elegida, la notificación formal se la hizo por carta documento Elías el 19 de diciembre, nueve días después del cambio de gobierno en la Provincia. Si bien como ente autárquico las autoridades pueden seguir trabajando, que el director puesto por el gobierno provincial saliente (como es el titular del ente) defina una licitación después del cambio de administración en la Casa Gris levantó polémica.

Al asumir las nuevas autoridades, con Guillermo Miguel como presidente y Marcelo Terenzio como asesor legal, empezaron analizar toda la documentación. Y además de llamarle la atención la fecha de la carta, no encontraron documentación que valide que el directorio respaldó la decisión comunicada por Elías.

Y no sólo eso, del análisis jurídico y contable de las ofertas presentadas concluyeron que ninguna de las dos cumplía los requisitos para ser aprobadas. Mientras tanto GPS resistía el abandono de negocio amenazando con recorrer el camino de un juicio al ente. Y, por su parte, los Gerbasi pujaban para que se firme la adjudicación apalancados en la carta de Elías.

Finalmente, el ente decidió dar de baja a la licitación, no extender los permisos de uso a GPS y anunciar que convocará a una  nueva licitación, no descartando la opción de terminar operando de manera directa la guardería.

El mensaje que baja la gestión, que tiene al frente a dos abogados, es que está decidida a emprolijar normativamente el ente y las relaciones con los concesionarios. Y en tren de dotar de más seguridad jurídica a los negocios vinculados, la decisión es no extender permisos de uso como el de esta guardería. Por eso, a medida que se venzan, van a recurrir a licitaciones. No en vano hasta corrieron al ex gerente (y también radical) Nolasco Salazar (a quien antes de irse Elías lo había pasado a planta permanente) argumentando también desprolijidades normativas en la otorgación de permisos de uso en los muelles de la ex zona franca paraguaya.