Por crisis de Vicentin, exportadores cambian autoridades de la Cámara Arbitral

El mega default de Vicentin sigue teniendo impacto institucional en la Bolsa de Comercio de Rosario. Ahora, Santiago Ramos, una de la principales cara visibles de la aceitera en la compra de granos, presentó su renuncia como camarista y secretario de la Cámara Arbitral de Cereales de Rosario, desvinculación que rápidamente se hizo efectiva.

“Ramos renunció a pedido de su sector (Ciara-Cec) y el reemplazante es Cesar villegas de la empresa Bunge, quien lo venía reemplazando mientras estaba de licencia”, le informó a punto biz el presidente de la Cámara Aribtral, Juan Carlos Reynares . “Villegas asumió el primer día hábil de abril”, agregó.

Vicentin dejó de pagar a principios de diciembre y a fines de ese mes -con los ánimos muy caldeados en el recinto de la Bolsa por el impacto financiero del default en los operadores- Ramos pidió licencia por 90 días a su cargo en la Cámara.

Por el contrario, otro ejecutivo de la defaulteada firma que también estaba en la entidad, Roberto Gianneschi, y quien era vocal suplente, presentó directamente su renuncia, una diferencia de postura que fue muy comentada en el mercado cerealista.

Según fuentes de Ciara-Cec la renuncia escrita de Ramos fue “ratificada” por la entidad exportadora, que ahora empezará a buscar un suplente para Villegas, a quien esperan designar para el recambio de autoridades de fin de año.

En la carta de renuncia, Ramos destacó el respeto y la camadería del grupo y se despidió agradecido al resaltar los mensajes de apoyo recibidos y señalando la importancia de tomar a las instituciones por sobre las empresas o individuos.

La Cámara Arbitral tiene dividida la participación de sus directivos entre los distintos sectores del comercio de granos en busca de una equilibrada representación de rubros de la oferta y la demanda. Y  son las entidades representativas de esos sectores (corredores, molineros, industriales, acopios, productores, exportadores) las que definen a los ejecutivos que enviarán a ocupar los asientos.

El incumplimiento de contratos de parte de Vicentin, que protagonizó el mayor default de la historia cerealera, tenía repercusión directa institucional en la Cámara Arbitral, que precisamente es el tribunal al que recurren las partes para la solución de diferendos.

Apenas estalló el escándalo Alberto Padoán, quien fuera presidente de la Bolsa de Comercio hasta unos pocos días antes de que Vicentin anunciara su default, tuvo que dar un paso al costado de la Mesa Ejecutiva en la que había decidido quedarse por dos años más como vocal, convirtiéndose así en el primer ex presidente de la Bolsa en seguir en la conducción una vez terminado su mandato.