Durante casi una década, la autora J.C. Carleson -que no usa su nombre real- trabajó como espía de la CIA en lugares como Irak y Afganistán. Ahora, de regreso a la vida civil, cree que algunas de las técnicas aprendidas y perfeccionadas en su paso por el mundo clandestino pueden ser útiles en el mundo corporativo.
'Trabaja como un espía: Consejos de negocios de un ex oficial de la CIA” es una guía sustanciosa y bien escrita que explica cómo conseguir un espía en la planta de un proveedor u obtener información valiosa sobre colegas y competidores, entre otras cosas.
Cuidado. Carleson aclara que su libro "no es un manual de trucos sucios". No te enseñará a poner micrófonos en la sala de juntas de tu competencia ni a interrogar a empleados desleales. A veces es necesario manipular individuos y aprovechar la vulnerabilidad de personas y organizaciones ajenas. Pero puede y debe ser realizado de acuerdo con patrones éticos.
A menudo, Hollywood muestra a los oficiales de la CIA en duros interrogatorios para obtener información de sus fuentes. La realidad, dice la autora, es que emplean técnicas más sutiles y menos violentas: usan la "incitación" más que la interrogación.
La diferencia es importante. Incitar significa obtener las respuestas sin necesidad de hacer preguntas. "No irías con tu competidor a pedirle que te revele secretos, ¿verdad?", dice Carleson.
Con el fin de la Guerra Fría, muchos espías dejaron de buscar secretos de países y empezaron a buscar secretos corporativos. Esto incrementó la necesidad de las empresas de tener estrategias de contrainteligencia para proteger mejor sus secretos.
El libro ofrece algunos consejos útiles de contrainteligencia a nivel personal, como viajar con la información mínima en la laptop, evitar los cibercafés, las computadoras de los hoteles y las redes WiFi públicas, y destruir los papeles con información confidencial. Carleson dice que las redes sociales son maravillosas para mantenerse en contacto con amigos, pero uno debe asumir que alguien, en algún lado, observa "con motivos innobles" todo lo que se postea.
En una empresa establecer normas de contrainteligencia es difícil, porque demasiado énfasis en la seguridad impide el flujo de información para promover la innovación o tomar decisiones informadas.
