Baldíos en zonas industriales pagarán una sobretasa del inmobiliario

La Intendencia de Rosario está terminando de pulir los detalles de un proyecto de promoción industrial que llegará al Concejo en las primeras semanas de marzo. El borrador del proyecto prevé aplicar una sobretasa del impuesto inmobiliario para terrenos baldíos en  zonas industriales y con los recursos obtenidos se alimentará un fondo para infraestructura. 

La novedad fue anticipada por el secretario de Producción Sebastián Chale en una reunión con empresarios del Parque Industrial Rosario Oeste, realizada el viernes pasado en el marco de la ronda de encuentros que los funcionarios vienen teniendo para tantear el termómetro del sector privado.

"Queremos ser agresivos en nuestra política de atracción de nuevas industrias, de relocalización de empresas que hoy están en el tejido urbano y de acompañar a otras que ya lo han hecho pero necesitan facilidades para invertir", señaló Chale en diálogo con Punto biz.

Consultado sobre las principales líneas del proyecto de ordenanza, el funcionario indicó que tendrá capítulos dedicados a cuestiones de zonificación y a consagrar aspectos de promoción urbanística que ya existían pero no estaban en práctica. Entre estos últimos se encuentra la puesta en funcionamiento de un fondo de infraestructura para realizar obras en áreas industriales.

"El fondo tiene que comenzar a operar -indicó Chale-, y para ello el recurso más inmediato es una sobretasa que tenga como fin sancionar el uso especulativo del suelo. No tiene ningún sentido que esos terrenos se sostengan en clave de especulación".

En Rosario existen alrededor de 300 lotes mayores a 5.000 m2 en zonas industriales, que totalizan cerca de 900 hectáreas. El 90% de estos terrenos representa cerca del 50% de la superficie productiva total de la ciudad, según un informe de la Dirección General de Industrias.

"El intendente tiene la decisión de hacerlo", comentó Chale, quien precisó que el proyecto se está terminando de definir con varias carteras, en particular con la de Hacienda. Son tiempos de vacas flacas en el Municipio y desde la repartición que dirige Diego Gómez prefieren evitar normativas que recorten los ingresos, por ejemplo desgravaciones.

"Analizamos todas las alternativas. Lo que sí estamos convencidos es de que los desarrollos industriales no pueden tener una carga de donación para el desarrollador como tiene los emprendimientos residenciales, que tienen otros márgenes de rentabilidad. Estas son inversiones que se hacen para producir y generar trabajo y generan ingresos por el lado del Drei. Es un círculo virtuoso al que tenemos que abonar", finalizó.