Desarrollarán torres de vivienda y oficinas en el terreno de una vieja imprenta

La Municipalidad de Rosario y la constructora Pellegrinet se pusieron de acuerdo y hubo fumata blanca para reconvertir el inmueble de la eximprenta Ferrazzini, en Urquiza al 1.900. El proyecto contempla locales comerciales en el frente patrimonial, tres pisos de cocheras subterráneas, un edificio de 19 pisos residencial y otro de 10 para oficinas.

Los detalles fueron confirmados a Punto biz por Néstor Pellegrinet, quien aseveró que a diferencia de otros desarrollos, éste será encarado de forma exclusiva por su empresa, a través de un acuerdo con el propietario del terreno (heredero de los antiguos dueños de la imprenta). El acuerdo con el Ejecutivo deberá ser refrendado por el Concejo, ya que se trata de un inmueble catalogado como patrimonial.

"Nosotros empezamos a conversar hace un año y medio y desde allí empezamos a trabajar, en base a un anteproyecto que los titulares del lote tenían. Ello se perfeccionó y logramos acordar con la Secretaría de Planeamiento un proyecto final", contó Pellegrinet, quien se guardó el número de la inversión pero adelantó algunos detalles de la iniciativa.

Como la fachada no puede ser demolida, será preservada para reutilizarse como un área comercial. En el extremo este del lote (un galpón que no está catalogado como patrimonial) se levantará un edificio de 10 pisos para oficinas, mientras que el emblema de la construcción será una torre de exclusivo uso residencial, retirada hacia el centro de manzana, que contará con 19 pisos. A ello se le suman tres niveles de cocheras subterráneas.

"Serán viviendas de buena calidad, de un nivel medio en cuanto a superficie y con variantes de uno a tres dormitorios", indicó el empresario, quien estimó un tiempo de construcción de entre 36 y 42 meses. "Nos gustaría iniciar lo antes posible", confió.

Antes de obtener el permiso de edificación, el proyecto deberá ser aprobado por el Concejo, al igual que cualquier iniciativa que escape al régimen general e implique el pago de una compensación. En este caso, la nueva construcción implicaría alturas más allá de lo permitido por el Código Urbano, pero por las dimensiones del terreno (un frente de 43 metros lineales y una superficie total de 2.000 m2) y el hecho de ya haber un edificio de similar altura en la manzana (el Holiday Inn sobre Dorrego), tiene buenas perspectivas de prosperar.