Marca de ultralujo italiana abrirá por primera vez local en Argentina

Dolce & Gabbana tiene 40 años de historia, nació en 1984 de la mano de Domenico Dolce y Stefano Gabbana, y para 2025 alistan apertura por primera en Argentina. En un momento del mercado local donde varias etiquetas premium decidieron dejar el país, la empresa italiana decidió apostar por el consumo top. 

De paso por el país, Alfonso Dolce, CEO de la firma, habló en exclusiva con El Cronista y puso fecha para el arribo de la firma a Buenos Aires. "Nuestro objetivo es abrir la primera tienda en la primavera de 2025", aseguró. 

El primer local de la marca será una "gran sorpresa", aseguró su número uno, quien adelantó que una vez abierta la tienda de indumentaria -el negocio de Moda y core de la empresa- estarán bajo análisis nuevos puntos de venta. 

Si bien Dolce no quiso adelantar la ubicación de la tienda aseguró que están analizando locales a la calle, entre ellas, por supuesto, la coqueta Avenida Alvear y dentro de shoppings, como podría ser el Patio Bullrich. "Puede ser una y después otra", adelantó el empresario. 

La inversión en la Argentina es parte de la estrategia de Dolce&Gabbana a nivel mundial que tiene dos ejes: abrir nuevos mercado y reposicionar el negocio en los que ya está. Para ello, hace dos años creó Home, una nueva división de muebles y accesorios y, en 2023, asumió el control del negocio de perfumería y cosmética. 

La firma vendrá al país de forma directa, modelo que utiliza en todo el mundo con una inversión que aún no pueden detallar ya que aún no tienen la locación pero que implica, en promedio, unos euros 7000 u euros 8000 por metro cuadrado, "no menos de euros 5000 y hasta euros 12.000". "Estar en cada país directamente es la única forma de asegurarnos que los clientes tengan la experiencia completa", explicó Dolce. "Las franquicias tiene un presupuesto limitado y compran lo que van a ofrecer con una mirada comercial", sumó. 

El empresario recalcó que para elegir un destino, éste tiene que tener dos condiciones: ser una ciudad turística y a la vez destino de negocios. "Notábamos que el argentino compraba en Europa o en los EE.UU., pero aún el mercado no estaba totalmente abierto, como cultura del cliente, para recibir una marca como Dolce & Gabbana. Ahora sí", recalcó.