Hace 10 años se volcaron al rubro del turismo y proyectan a lo grande

La historia de Kamchatka se inició de manera poco convencional. A pesar de su formación en turismo, Lautaro Díaz no tenía experiencia previa en la industria. "Me costó mucho, estaba fuera del rubro", admitió en diálogo con Punto biz. Sin embargo, con la ayuda de su padre que tenía experiencia como directivo general en una reconocida empresa de transporte, dio el primer paso para animarse a emprender.

Esta oportunidad lo llevó a ofrecer servicios a grandes grupos, incluyendo un exitoso viaje a Tecnópolis que marcaría el inicio de su aventura en el mundo del turismo. Con una historia que contar, en este aniversario el objetivo es reforzar su presencia en el mercado local y, al mismo tiempo, innovar para ofrecer a sus clientes una experiencia integral y distinta al resto de las agencias convencionales.

"La pasé muy mal al principio", recordó Díaz, quien llegó a tener distintos trabajos, entre estos de mozo, para ganarse la vida mientras construía su agencia de viajes. Pero la confianza de su padre y su inquebrantable determinación comenzaron a dar sus frutos. "Mi padre me alentó a abrir una agencia de turismo", reveló, y así nació Kamchatka en 2013, una empresa que no se detiene y continúa en plena expansión en sus primeros 10 años de existencia.

El año 2018 marcó un cambio significativo en el camino de Kamchatka cuando se trasladaron a un nuevo espacio en colaboración con un amigo, Matías Leonetti. Esta mudanza les permitió expandirse y para 2019 ya eran un equipo de cuatro personas. No obstante, la pandemia trajo nuevos retos.

"Durante la pandemia, inventé Viajeros Consentidos, una propuesta que consistía en viajes virtuales que incluían experiencias gastronómicas típicas a domicilio. Los participantes podían disfrutar de presentaciones sobre destinos internacionales, seguidas de la preparación de platos y postres típicos de ese destino por parte de chefs locales”, compartió Díaz.

Aunque no generaba ingresos significativos, Viajeros Consentidos permitió a Kamchatka entrar en miles de hogares y consolidar su marca y, por supuesto, surfear la debacle de la pandemia. Cuando las restricciones de viaje se levantaron, la demanda acumulada estalló, lo que representó un punto de quiebre para la empresa.

"Nunca tuve la intención de ser un agente de turismo, pero siempre visualicé la creación de un nuevo paradigma en la industria, donde Kamchatka fuera la estructura y la marca, y donde los agentes de viajes pudieran vender a través de nosotros. Quería maximizar el turismo y ofrecer a los vendedores una comisión sustancial. Eso, para mí, fue un punto de quiebre", confesó.

Una década de éxito y un objetivo claro: seguir creciendo

Cumplir 10 años no es poca cosa y, con la mente puesta en ese mérito, desde la empresa quieren hacerse más fuertes en Rosario. En ese sentido, la agencia está implementando tecnología con una moderna plataforma e-commerce para impulsar las ventas en línea y de este modo mejorar la experiencia de los clientes.

Si bien la implementación de nuevas tecnologías es importante, Díaz destacó que en Kamchatka mantienen a la vez una apreciación por la forma tradicional de hacer las cosas, principalmente brindando un trato cercano y humano a cada cliente. “Contamos con un equipo altamente calificado que comparte los mismos valores y la esencia que impulso a nuestra empresa desde el principio. Existe una sinergia entre todos los miembros de nuestro equipo, lo que nos permite potenciarnos mutuamente y ofrecer la mejor calidad de servicio a nuestros pasajeros”, puntualizó, y añadió: “Mantenemos firmemente la tradición de brindar un servicio personalizado, donde cada cliente se siente atendido de manera única y especial”.

Además, con motivo del décimo aniversario Kamchatka rediseñó su marca y están concentrados en construir una comunidad de turismo en la que los miembros se sientan orgullosos de pertenecer. “Nos centramos en ofrecer un servicio de calidad y una experiencia postventa excepcional para nuestros pasajeros. Estamos 24 horas disponibles y en cada paso que den junto a nosotros”, aseguró. Por si fuera poco, realizaron el viernes 25 de agosto una fiesta en el salón Posta 36, a la que asistieron un gran número de invitados, siendo el evento más grande organizado en Rosario por una empresa de turismo en el último tiempo.