Startup logró fondeo clave para avanzar en tratamiento contra el Alzheimer

Es una sociedad anónima nueva, como tantas otras que han nacido en los últimos años en territorio santafesino y que tienen el firme objetivo de contribuir con soluciones vinculadas a la salud y la alimentación. La firma Biosynáptica SA, con sede en la capital provincial, acaba de cerrar su primera ronda de inversión en la que logró hacerse de un fondeo clave en dólares con el que busca terminar de realizar pruebas en animales en torno a un tratamiento con una molécula modificada que puede morigerar el impacto de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson.

La molécula en cuestión es la Eritropoyetina (EPO), un bioterapéutico aprobado hace años, para el tratamiento de anemias de distintos orígenes, que produce y mantiene glóbulos rojos en circulación como principal característica. Ahora bien, hace no tanto se descubrió que dicha molécula también genera un impacto positivo en el desarrollo neuronal.

“Nuestro equipo trabaja desde 2014 con la EPO y puntualmente estamos en plena tarea para evitar que la molécula genere efectos negativos mientras atenúa los síntomas en pacientes con enfermedades neurodegenerativas”, indicó María de los Milagros Bürgi, integrante de Biosynáptica SA, bioquímica e investigadora del Centro Biotecnológico del Litoral, en contacto con Punto biz.

Es que cuando se pretende usar la molécula en pacientes que no están afectados por la anemia para el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas, se corren riesgos severos de generación de trombos y coágulos. El logro del equipo santafesino es medular. “Mediante tecnología innovadora bloqueamos el efecto indeseado que se privilegia en tratamientos de anemia, pero preservamos la capacidad neuroprotectora y neuroplástica que es lo que necesitamos para un paciente con Alzheimer”, graficó Bürgi.

El tratamiento con la EPO modificada es capaz de proteger a las neuronas del daño de agentes tóxicos o la pérdida de las conexiones neuronales por factores comunes a la enfermedades neurodegenerativas, pero también tiene la capacidad de volver a establecer esas conexiones neuronales para que luego se logre la sinapsis y pueda funcionar el tejido cerebral.

Financiamiento clave

Con un primer desembolso propio de u$s120.000, la novel compañía inició en marzo la fase de nacionalización de la patente para trabajar con la molécula modificada en más de 20 países de Europa, Asia, América y Oceanía. Previamente Biosynáptica SA había obtenido la licencia para ser la operadora de la tecnología de parte de las entidades públicas que habían apadrinado al equipo en la investigación.

“Vale aclarar que todos los que conformamos la sociedad anónima somos docentes e investigadores de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas y fue tanto la UNL como el Conicet quienes promovieron la creación de la empresa para lograr así mayor facilidad para acceder a financiamiento internacional”, mencionó Bürgi.

Precisamente bajo este nuevo encuadre es que la SA quedó incubada dentro de la Aceleradora del Litoral que integran la UNL, la Bolsa de Comercio de Santa Fe y el Parque Tecnológico Litoral Centro y concretó una muy exitosa primera ronda de inversión. “Se trata de un capital del orden de los u$s300.000 que es fundamental para concluir con la prueba de concepto de enfermedades neurodegenerativas en animales e iniciar las fases preclínicas en la que se evalúan los efectos negativos tambi´pen en animales”, planteó la docente de la cátedra de inmunología básica sobre lo que se viene antes de iniciar las pruebas en humanos.

El grupo es comandado, además de Bürgi, por los doctores Marcos Oggero-Eberhardt, Ricardo Kratje y Matías Depetris.