Tras 25 años de historia, tradicional restaurante sirvió su último plato

Tras 25 años de historia en la ciudad, el tradicional restaurante vasco Zazpirak Bat cerró sus puertas. El domingo 29 de diciembre sirvieron la última cena y sus dueños, la familia Aguirre Soraluce, celebró su trayectoria con un menú que incluyó platos tradicionales de la región como pintxos, tapas, cazuelas, maridados con sidra de marca Txapela y etiquetas de vino. La chef, Itziar Aguirre, comunicó que la idea es iniciar nuevos proyectos y seguir pisando fuerte con la comida vasca a partir de nuevos formatos.

“Tiene que ver mas con una cuestión emocional, con una necesidad de cambiar las estructuras internas. Cuando las personas vinieron a la despedida que hicimos el domingo me decían que querían llevarse los sabores de nuestra comida en la memoria y yo les contestaba que no iba a dejar de cocinar, que no se preocuparan. La realidad es que se pueden hacer muchas cosas y quiero profundizar en esos proyectos que tengo, de hecho ahora estoy trabajando en sacar nuevos productos, llegar con la cocina vasca a al gente de otra manera”, indicó Aguirre a Punto biz

El emprendimiento gastronómico nació como una iniciativa familiar en el año 1995, de la mano de Arantza Soraluze y sus cuatro hijos: Mikel, Xabier, Itziar y Ainhoa. Lo que comenzó como un pequeño negocio fue tranformándose poco a poco en una empresa gastronómica basada en una receta culinaria que recuperaba las raíces de la comida vasca y representando todo un emblema de la comunidad.

En el año 2007 el restaurante Zazpirak Bat de Rosario fue galardonado con el 23 trofeo internacional de Turismo, Hotelería y Gastronomía y sus chefs, Arantza e Itziar, fueron convocadas para participar en diversos espacios en medios de comunicación radiales y televisivos llevando las recetas vascas más allá de las fronteras locales, incluso a través de la docencia.

Si bien la crisis económica de los últimos meses afectó la afluencia de clientes a distintos restaurantes y bares de la ciudad, Itziar indicó que no fue el caso del Zazpirak Bat. “Obviamente se sintió en este tiempo una baja en la cantidad de público, pero por suerte siempre tuvimos clientes fijos que elijen nuestras opciones porque son muy particulares, comidas que, cuando arrancamos, no existían y que se especializan en pescados de cocina vasca”, destacó la chef y agregó que en pocas semanas dará a conocer su nuevo emprendimiento que, al igual que el restaurante, seguirá teniendo una impronta familiar