Públicos vs. privados, ¿quiénes lograron mejores aumentos en 2024?

Si bien la mejora es todavía lenta y parcial, los salarios empiezan a recuperar parte de lo perdido. El desafío principal para el corto plazo será consolidar esta tendencia positiva.

Según los últimos datos del Indec, correspondientes a octubre, el Índice de Salarios mostró un aumento del 4,6%, mientras que la inflación en el mismo mes fue del 2,7%. Esto implicó que, en promedio, los salarios lograron superar el ritmo de la suba de los precios.

Al desglosar por sectores, los trabajadores del sector privado registrado vieron un incremento del 4%, los empleados públicos un 4,3%, y los trabajadores no registrados un 7,7%. A pesar de estos aumentos, la realidad es que los salarios aún están lejos de reflejar una mejora sustancial, ya que el costo de vida sigue siendo elevado, y la mayoría de los trabajadores no percibe un alivio real en su poder adquisitivo.

En cuanto al comportamiento de los salarios durante 2024, el sector privado no registrado fue el que más ganó, con un aumento acumulado del 156,8% en los primeros diez meses del año, seguido por el sector privado registrado, con una suba del 133,1%, y el sector público, con un incremento del 109,9%. Durante este período, la inflación fue del 107%, lo que dejó a los salarios con un crecimiento superior en términos nominales, a pesar de que la inflación en general superó los aumentos salariales en muchos casos.

Si bien los aumentos salariales fueron notables, la diferencia entre la inflación y los incrementos en los ingresos se traduce en una pérdida de poder adquisitivo a lo largo del año. A nivel interanual, de octubre 2023 a octubre 2024, los salarios mostraron un aumento del 172,1%, pero la inflación alcanzó un 193%, lo que representó una pérdida real del 7%.

En detalle, los salarios del sector privado no registrado crecieron un 199,4% en 12 meses, logrando una mejora real del 2,1%, mientras que los trabajadores del sector privado registrado perdieron un 2,8% en términos reales, y los empleados públicos experimentaron una pérdida de poder adquisitivo del 18,5%, con un aumento salarial del 138,7%.

A pesar de la caída de la inflación, los salarios siguen lejos de recuperar su poder adquisitivo perdido en los últimos años. Sin embargo, la baja de la inflación, sumada a un repunte gradual, ha comenzado a dar señales de estabilización, lo que podría ofrecer un respiro a los bolsillos de los trabajadores en los próximos meses.