Entre guerra y pandemia: qué desafíos enfrentan las exportaciones argentinas

Si el horizonte de la distribución de alimentos ya se había tensionado con la irrupción del coronavirus que paralizó por un buen tiempo a una maquinaria logística que hasta el día hoy no se ha recuperado del todo, la escalada bélica en el Mar Negro complejizó aún más severamente al ecosistema productivo, y hoy, entre todas las consecuencias, la más clara es el encarecimiento de los fletes.

La bomba tiene, además, otros componentes, como la menor disponibilidad de embarcaciones, la desactivación de muelles centrales para el intercambio de mercadería, y la suba abrupta de insumos vitales, como el combustible.

Para afrontar ese escenario, la agroindustria argentina enumera pros y contras. A su favor, el campo goza del alza en las cotizaciones internacionales, y dispone de terrenos fértiles para asegurar volumen de producción de acá al futuro,siempre y cuando no medien coyunturas climáticas severas, y se logren zanjar desafíos internos, como los faltantes en el aprovisionamiento de gasoil y las dificultades asociadas a la inflación.

Para conocer todos los detalles del sector, palpar la realidad y sacar propias conclusiones, podés acceder al especial Agro haciendo clic acá.