Queja de los corredores llegó a la Casa Rosada

Los Centros de Corredores de Rosario, Santa Fe, Bahía Blanca, Buenos Aires y Córdoba se pusieron al hombro el reclamo por la normalización del mercado de trigo. Y hicieron tanto ruido, que sus quejas y denuncias por el control de las exportaciones llegaron a las más altas esferas de gobierno. 

En efecto, en los últimos quince días los Centros de Corredores publicaron dos informes, con amplia difusión en la prensa, en los que cuantificaron las pérdidas que genera la política triguera actual, explicaron cómo se producen transferencias de ingresos hacia adentro de la cadena agrícola (generando renta extraordinaria en compradores a costa de vendedores) y propusieron alternativas de salida. 

El tema es que ayer, y cuando todavía repiqueteaba en los medios el último comunicado, les llegó una invitación de la Secretaría de Comercio Interior y del Ministerio de Agricultura para reunirse el jueves en Buenos Aires con todos los Centros de Corredores.

Independientemente del resultado, que esté Comercio Interior en la reunión es importante porque es quien talla en las decisiones. Pero además muestra que el sector ganó visibilidad en las esferas de gobierno, factor decisivo para poder interceder en las decisiones de esta o de cualquier futura administración

“No nos dejen solos. Necesitamos que nos acompañen”, fue el mensaje con el que el directivo del Centro de Rosario, Gustavo Guillamet, cerró ayer una de las notas que hizo a la prensa.