Embarazada y todo, egresó con 10 y es la mejor promedio de Santa Fe

Yanina Gallieni logró lo que pocos; conjugar estudio con trabajo y un bebé recién nacido. Así, demostró que se puede y con 10, es la mejor promedio universitaria de Santa Fe. Se recibió de Psicóloga en el 2010 en la UNR y el año pasado completó los estudios del Profesorado Universitario para la Educación Secundaria y Superior en la Universidad Abierta Interamericana (UAI), carrera por la que obtuvo un promedio de 10.

Yanina cursó sus últimos meses del profesorado embarazada, e incluso preparó tesis con Bautista recién nacido, que hoy ya tiene 8 meses. El apoyo de Maximiliano -su marido-, sus compañeros y profesores fue clave. “La última materia que rendí, ya estaba con reposo y no debería haber ido, pero fui igual. No pude evitar el reto de la profesora, pero rendí bien”, dice.

Hoy trabaja con niños con discapacidad en “El Pasaje”, un consultorio multidisciplinario que trabaja a partir de tratamientos integrales abordados desde la psicología, la psicopedagogía, la fonoaudiología, la kinesiología y la terapia ocupacional. Además, es docente de la materia “Teoría del Currículum y su didáctica” correspondiente al segundo año de la carrera de Educación Física del Instituto San Martín.

“Siempre me imaginé trabajando en un consultorio con el clásico diván y atendiendo a adultos. Y hoy termino cada sesión disfrazada con vinchas, antifaces y cuernitos”, cuenta entre risas. Su trabajo en el consultorio incluye terapias individuales y algunos talleres que comparte con otros profesionales, además de algunas visitas y trabajo en escuelas. “La idea es trabajar con lo lúdico, el dibujo y también usar la tecnología con los videos y canciones. Primero el vínculo y después analizamos psicoanalíticamente las conductas”, explica.

LA CHICA 10

Después de descartar estudiar Periodismo deportivo, Yanina optó por Psicología. “Me gusta mucho leer y la carrera me encantó. Tuve una beca Nacional durante los años de cursado que me ayudó un montón, además del apoyo familiar”, apuntó.

Sus primeros pasos en el ámbito laboral fueron muy difíciles. “Hacía muchos trabajos ad honorem, pero como necesitaba un ingreso, empecé a trabajar en una Perfumería mientras buscaba algún trabajo de lo mío”, cuenta. En esta búsqueda, comenzó a trabajar en un Centro Educativo Terapéutico para chicos discapacitados, y allí conoció gente que le permitió llegar al Consultorio donde hoy trabaja y también a la carrera docente: “Una compañera que era profesora me contó que había una vacante en el Instituto San Martín y fue así como me acerqué”. Después de probar y darse cuenta que le gustaba, se anotó para cursar el Profesorado en la UAI para cumplir con el requisito de las pedagógicas.

Durante un año y medio, cursó todos los sábados de 8 a 14. Del cursado, Yanina se llevó grandes docentes, compañeros y contenido que hoy usa al momento de dar clases. “Eramos dos comisiones grandes, con un grupo super diverso entre los que había médicos, arquitectos, nutricionistas, economistas. Siempre tuve el prejuicio de qué podría aportarme la carrera, si ya estaba dando clases. Y la verdad es que me dio un montón. En especial dos docentes como Inés Masera -que después corrigió mi tesis-, y Liliana Oppido, que nos dio Currículum, la materia que hoy estoy dando y que me ayudó a planificar y usar estrategias para que la clase sea más atractiva”, destaca.