El destino de la Fluvial de Rosario era incierto y apareció La Capital

Tras una fallida licitación, el destino del complejo fluvial de la costa central de Rosario entró en un cono de sombra. El ente portuario dio de baja en silencio el proceso lanzado en 2018 para el cual se habían anotado dos grupos, y se tomó la decisión -aún no rubricada - de prorrogar la concesión de La Fluvial hasta abril de 2022. 

¿Qué destino tendrá el complejo? Es una pregunta que por ahora esquivan las autoridades del Enapro que asumieron hace ya más de un año. Lo cierto es que el administrador y sub locatarios están con más problemas económicos y financieros que nunca por los efectos de la pandemia. Versiones señalan que el ntendente Pablo Javkin pretende que la Fluvial pase a integrar una suerte de corredor de innovación público privado, al estilo del distrito norte de Medellín, pero lo cierto es que hoy no tiene la potestad para decidir al respecto. 

El diario La Capital anunció hace unos pocos días que mudará su redacción a las plantas superiores del complejo, en las cuales el grupo Marshall desarrollaba eventos. Fuentes cercanas al Enapro sostuvieron que los directivos se enteraron “por los diarios” de la novedad. Explican que Caprile había comunicado que estaba en tratativas para alquilar espacios pero había omitido que se trataba del Decano. 

La mudanza es un viejo anhelo de Gustavo Scaglione, director desde hace un par de años del diario. Desde el día cero manifestó: “Voy a hacerme cargo en serio de La Capital el día que pueda mudar la redacción”. Intentó conseguir lugar en otro espacio público como la Zona i del viejo batallón 121 pero no pudo llegar a un acuerdo, porque allí aspiran a albergar empresas con tecnología de punta.

El otro dato sorpresivo fue que los directivos decidieron la mudanza a un local con un contrato de menos de dos años de vida. Es cierto que la redacción de un diario está constituida por un conjunto de puestos de trabajo y salas de reuniones -comodidades fáciles de mover como las que hoy ofrece cualquier coworking-, pero también es cierto que todas las mudanzas son complicadas. A menos que la presencia de La Capital en la zona costera sirva para condicionar -por el peso propio que tiene el Decano- cualquier proceso futuro de licitación. Por culpa de estos ruidos fue que durante los últimos días las autoridades del Enapro encabezadas por Guillermo Miguel se convirtieron en figuritas difíciles de conseguir para dar las explicaciones del caso. 

Según pudo saber Punto biz a la extensión de la concesión hasta abril de 2022 aún le falta la firma. Es decir que todas las posibilidades están abiertas, desde impedir cualquier nueva locación, dilatar los plazos para el lanzamiento de una nueva licitación, licitar la Fluvial como complejo o a todas sus partes por separado. Es Guillermo Miguel quien maneja la batuta y la palabra final la tiene el gobernador Omar Perotti. 

Otra evidencia de lo problemático que son las mudanzas vino de la mano de una asamblea del personal del diario y del Sindicato de Prensa, que salió a fustigar el “millonario gasto de una mudanza” cuando la empresa aquilata deudas cuantiosas deudas con la obra social y de pago al personal. Quizás sea por ese conflicto en puerta y como la salud económica y financiera del Decano no es lo suficientemente buena como para ponerse al día con sus acreedores, que la noticia de la mudanza (detectable en google con el título “El Diario La Capital muda su redacción a la Fluvial”) desapareció como tal y ahora remite a la portada de la web.