Cómo hacer la transición hacia una alimentación más saludable

Punto biz charló con Mariano Risiglione, titular de ESENIO, cocina honesta, quien brindó algunos tips para iniciar una transición sostenida en cuanto a la alimentación saludable.

- ¿Cómo tomó el mercado esta nueva propuesta de menús plant-based?

La repercusión fue muy buena, de hecho superó nuestras expectativas. Si bien sabemos que son platos para un público reducido, encontramos mucha gente con deseos de seguir mejorando su alimentación.

- Sé que vuestros menús plant-based son veganos. ¿Vegano y plant-based son lo mismo?

No son la misma cosa. Si bien son muy similares, es posible que seas vegano pero no comas una dieta a base de plantas y alimentos integrales o puede que comas una dieta a base de plantas pero no necesariamente seas vegano. En nuestro caso incluimos huevos o quesos en la mayoría de los menús por eso decidimos en este menú no incluir ningún alimento animal.

El veganismo es la práctica de minimizar el daño a todos los animales absteniéndose de todo producto animal como carne, pescado, lácteos, huevos, piel, seda y cuero. Es más que una dieta, es una forma de vida que busca excluir toda forma de explotación y crueldad hacia los animales por comida, vestido o cualquier otro fin. 

Una dieta a base de plantas, por otro lado, se trata solo de la comida como su nombre indica. Se trata comer vegetales, frutas, granos integrales, frutos secos, semillas y legumbres. Si están sabiamente combinados son más que suficientes para realizar un aporte nutricional completo. Se privilegian los alimentos frescos, de estación y se suprimen ingredientes congelados, precocinados o industrializados ya que han perdido gran parte (o todo) de su energía vital.

- ¿Qué pasos sugieren para incursionar en estas dietas?

Es importante saber por qué quiero iniciar un cambio; encontrar esa razón que nos inspire y emocione nos ayudará a enfocarnos y a cumplir los objetivos; por ejemplo prevenir enfermedades, sanar alguna dolencia (reducir azúcar en sangre, colesterol, etc.), vivir más tiempo, perder peso, colaborar con el medio ambiente, no dañar animales o simplemente sentirme más pleno y con más energía.

La clave para una mejora sostenible es que no sea difícil, o al menos no tanto. Si el cambio se produce paulatina y naturalmente, el cuerpo mismo nos llevará a seguir profundizando con mejores hábitos. 

- ¿Cómo hacerlo para no morir en el intento?

La transición no tiene que hacerse de golpe, puede demorar 2 semanas o puede demorar un año, así que no espere la perfección. Yo propongo tres etapas:

1. Primero lo más fácil: Es aconsejable empezar por aquellos productos nocivos sobre los que no tenemos mucho apego y reemplazarlos por otros más saludables. Por ejemplo, reemplazar un alfajor por una fruta.
 

2. Divide y reinarás: divida las cuatro comidas del día y vea en cada una de ellas qué productos puede sustituir. Preste atención a qué eligió comer en cada una, sustituya al menos una porción. No es bueno al comienzo privarse demasiado. Por ejemplo, una ensalada es más sano que una pizza pero si no puede dejar la pizza, coma un poco de cada cosa.
 

3. La mitad o un tercio es mucho mejor que nada: notará un cambio si consigue reducir a la mitad o a la tercera parte el consumo semanal de carnes, frituras, alcohol, harinas refinadas, dulces y demás cosas que sabe que no le aportan más que toxinas. Cuando lo haya conseguido, siga reduciendo la frecuencia.