Tras un tenso conflicto sindical, Razzini vuelve a abrir sus puertas

Después de un tenso conflicto con el Sindicato de Camioneros que precipitó el cierre de la firma, el Grupo Razzini volverá mañana viernes a abrir las puertas de sus tres empresas. “Luego de tres largos meses, este conflicto cerró su ciclo, homologándose los acuerdos en la justicia laboral de Santa Fe, y permitiendo de este modo la reapertura y la normalización en nuestras empresas”; explicó Verónica Razzini, a través de un comunicado.

El conflicto se inició a principios de junio pasado, cuando un grupo de trabajadores de las dos plantas de Razzini -que trabaja en el rubro de la construcción- solicitaron ser encuadrados en el convenio colectivo del Sindicato de Camioneros argumentando que realizaban tareas como choferes de transporte, y presionaron a la firma bloqueandola por medio de puquetes. Cabe aclarar que los empleados de Razzini están registrados en la Uocra (Construcción) y la Asociación Empleados de Comercio. La empresa respondió con una carta documento con denuncias penales que terminaron en causas de despido. Fue así que los transportistas despedidos, con el apoyo de Camioneros, montaron una carpa frente a un galpón de la compañía en Pueyrredón 5800 como señal de protesta.

El Grupo Razzini empezó a sufrir bloqueos y piquetes en la entrada de las empresas del grupo, no dejando despachar mercadería, ni ingresar a clientes ni a proveedores y hostigando a la gente que se acercaba. Hartos de ser bloqueados durante dos meses por el sindicato de camioneros, decidieron cerrar sus puertas y encarar la vía judicial.

El mes pasado, Razzini obtuvo un fallo a favor de la Justicia que negó la reincorporación de los trabajadores que reclamaban ser encuadrados en Camioneros. Finalmente, la empresa llegó a un acuerdo económico con los despidos y tiene todo listo para volver al ruedo.

“Por un lado, sentimos un gran alivio al terminar con esta indeseable situación y por otro, pensamos que, tristemente, el costo soportado por todos estos episodios es incalculable, en especial por las empresas, que son las que generan empleo, y en las que, estas señales calan profundamente en sus prospecciones y expectativas”, describe la directora de Razzini.