Vicentin descalificó una denuncia "errática" de la UIF ante la Justicia Federal

Tras el pedido de nulidad por la reciente venta de Friar de parte de organismos nacionales, la agroexportadora Vicentin defendió su accionar en sendos escritos presentados ante la Justicia Federal. Lo hizo en el marco del expediente que maneja el juez Julián Ercolini, iniciado en enero pasado donde se investiga la relación entre la empresa y el Banco Nación durante 2019.

A través de dos misivas -una dirigida al propio Ercolini y otra al fiscal Gerardo Pollicita-, la compañía solicitó el rechazo de la medida promovida por la Unidad de Información Financiera (UIF, que imitó lo realizado por Afip en la causa concursal), argumentando que el motivo de la transacción no fue el vaciamiento sino la necesidad de hacer frente a inversiones que permitan sostener la actividad del frigorífico.

Ante Ercolini, los abogados de la firma santafesina pidieron incluso que se sugiera al Estado nacional cesar en "presentaciones erráticas, basadas solo en trascendidos periodísticos". En efecto, la demanda impulsada por la UIF se hizo en base a publicaciones aparecidas en medios, donde también se hablaba de que el grupo evaluaba desprenderse de nuevos activos.

Para los asesores legales de la agroexportadora, además, el pedido resulta incongruente, no solo con el objeto procesal de la causa sino también con el propio objetivo que la UIF trazó en el expediente. Lo que muestran, en base a información que consta en los balances de las firmas, es que la transferencia de Friar a BAF Capital nada tiene que ver con la vida de Vicentin SAIC -la sociedad que ingresó en convocatoria en febrero y que por consiguiente ya cuenta con una inhibición general de bienes-.

En el escrito presentado ante Pollicita se argumenta que en 2009 Vicentin inició un proceso de reorganización patrimonial, consecuencia del "debilitamiento" en su relación con sus acreedores financieros, que se dio porque la firma había diversificado inversiones más allá de su core business.

En ese proceso es que Vicentin SAIC vendió la mayoría del paquete accionario a Nacadie Comercial y Vicentin Family Group, dos sociedades con sede en Uruguay que a partir de allí "concentraron el mayor financiamiento con garantía de sus propias acciones o de su propia actividad".

"Resulta incomprensible que esas acertadas decisiones que permitieron preservar esos activos, sean criticadas ligeramente ahora, por bancos internacionales y locales que negaron su apoyo financiero a estas actividades", concluyen, negando así el argumento de vaciamiento que habían indicado tanto desde UIF, Afip y Banco Nación.