El juez del concurso de Vicentín insiste con designar a dos veedores

El juez Fabián Lorenzini, a cargo de la convocatoria de Vicentin, dispuso la designación de dos veedores para monitorear la situación financiera y económica de la agroexportadora. Según argumentó, dicha decisión se basa en la gran cantidad de información acumulada sobre el pasado y presente de la empresa, que "amerita la actuación de expertos que puedan brindarnos adecuados elementos de discernimiento".

La disposición se conoce una semana después que el gobierno nacional dio marcha atrás con la avanzada sobre la empresa, a través de un DNU que derogó la norma original, donde se designaban dos interventores. El propio presidente Alberto Fernández criticó la actuación de Lorenzini, a quien objetó haberle puesto palos en la rueda cuando redujo el papel de los interventores que había designado a simples veedores.

Con esta nueva resolución, el juez cubre las vacantes que dejó el Estado nacional. Los nuevos veedores deberán ser propuestos por el comité de vigilancia, órgano integrado por los principales acreedores (Banco Nación, ACA, el gremio aceitero y los bancos internacionales IFC y FMO). Según solicitó Lorenzini, al menos uno debe tener experiencia en el rubro comercial e industrial de la concursada.

Entre las funciones a cumplir se incluyen: 

# Elaborar informes sobre la situación financiera y económica de Vicentin, "en todos los segmentos de actividad empresarial", así como también respecto a inversiones y actividades proyectadas a los fines de asegurar la continuidad de la empresa. 

# Examinar el estado general de los negocios de la sociedad y detectar las unidades o sectores más vulnerables, así como también analizar toda la información que consta en el expediente.

En los considerandos de la resolución, Lorenzini plantea que con el devenir del expediente (que a esta altura ya acumula más de medio año) se han agregado diversos informes "que abonan a la complejidad del concurso". Entre ellos, los realizados por los funcionarios del gobierno nacional, que dieron cuenta "de la magnitud de los negocios de la sociedad concursada".

Vale recordar que en realidad solo uno de los funcionarios designados por Fernández logró ingresar a la empresa. Se trató de Luciano Zarich, el designado subinterventor, que durante seis días dirigió la compañía. Según relataron diversas fuentes con acceso a la causa, en ese plazo no tomó decisión alguna, aunque sí relevó información, que luego fue insumo principal de un informe de la Sindicatura General de la Nación (Sigen).

"Resulta indiscutible la necesidad de contar con veedores controladores toda vez que, el tempestivo análisis y comprensión de dicha información, resulta estratégica para avizorar el estado patrimonial de la concursada, sus negocios y las operaciones comerciales que realiza. De ello depende su capacidad, actual y futura, para afrontar sus obligaciones y mantener miles de fuentes de trabajo", planteó Lorenzini en su escrito.