Las ocho reglas inmutables de la comunicación en los negocios

En los negocios, la forma en que te proyectas y comunicas con todos los que forman parte de tu ecosistema (clientes, proveedores, socios, colegas, equipos, etcétera) va creando, con el tiempo, una imagen que reviste tu propia personalidad. A esto llamamos reputación o prestigio. Y es la piedra angular de la comunicación en los negocios.

¿Querés generar una gran comunicación en tu entorno de negocios? estas son ocho reglas que nunca debés olvidar:

1. La imagen no es vanidad

No nos vestimos para nosotros, sino para los demás. A veces olvidamos este claro principio o menospreciamos la importancia de presentarnos bien, peinarnos bien o lustrar los zapatos. Verte bien importa mucho, pero es aún más relevante el gesto de arreglarse para ver a alguien, porque así le decimos que es importante, que nos interesa, que estamos dispuestos a hacer un esfuerzo.

2. Las reglas de la vieja guardia

Tu abuelo lo sabía muy bien: hay que llegar puntuales, cumplir con la palabra dada, entregar las cosas en el día y hora acordados. Aún en la era de los negocios digitales, estas reglas no han cambiado en lo absoluto y las personas  que mantienen las reglas de la vieja guardia son las que se elevan en su empresa, su negocio y en la vida.

3. Reputación Online y Offline

Lo que sí ha cambiado es el alcance que tienen nuestras acciones. Es fundamental que haya congruencia entre tu imagen profesional y tus redes sociales. Detenete unos segundos antes de publicar lo que sea, filtrá lo que estás enviando, revisá que esté bien escrito y que sea algo de lo que te puedas sentir orgulloso en tu próxima entrevista de trabajo.

4. Conectá y elevá a los demás

Lo primero y más importante es tratar a todo el mundo con verdadero cariño y absoluta dignidad, desde el mozo hasta el CEO. Esto por sí mismo es lo correcto, pero además hay un nivel estratégico: quizás ese mozo en diez años sea el director general. Con aquellos que tengas mayor contacto y cercanía, no permitas que la relación se apague: felicitalos en su cumpleaños; enviá una tarjeta cuando tengan un ascenso y está presente en el funeral de su padre. 

5. No pidas ayuda, pedí consejo

Cuando pedimos consejo, le estamos diciendo a la otra persona que la respetamos, que confiamos en su inteligencia y en su prudencia, pero sin pedirle más que eso. Casi nadie te negará un consejo… y quizás hasta se ofrezcan a ayudar.

6. El que quiere estar, está

Gran parte de la comunicación en los negocios se realiza de manera informal, en los pasillos, congresos, conferencias y reuniones sociales. Aunque no digas nada ni cierres ninguna venta, el solo hecho de estar ahí va formando una relación con las personas, que empezarán a considerarte como parte de su “tribu”.

7. Creá redes, liderá, transformá

Trascendé los muros de tu negocio para interactuar con otros jugadores del ecosistema. Las cámaras, grupos empresariales y sistemas de networking son campo fértil para crear relaciones y mejorar tu entorno. No todo en la vida es competencia: también hay tiempo para planear y trabajar juntos, ayudar a otros y elevar el piso para todos.

8. Habilidades de comunicación

Hablar en público, liderar una junta, hacer un pitch de ventas, dialogar con los clientes molestos: todas estas formas de expresión oral te abrirán puertas y te pondrán en la mira de personas que pueden avanzar tu carrera. Lo mismo va para escribir correctamente y con buen estilo.