Javkin manifestó su profunda preocupación por el default de Vicentín

El intendente de Rosario Pablo Javkin se reunió esta mañana con directivos de la Bolsa de Comercio de Rosario para analizar el impacto del default de Vicentín en la economía regional.

El jefe comunal llegó acompañado del secretario de Producción, Sebastián Chale, y desayunó en la sala de Presidencia de la entidad. Junto a los directivos de la Bolsa, encabezados por su vicepresidente Hugo Grassi (h), estaban representantes del corretaje, el acopio  y la producción. No asistieron enviados de las cooperativas. Y en ese sentido, tampoco el secretario de la Bolsa, Fernando Rivero, quien es ejecutivo de ACA, la principal acreedora de Vicentín que en las últimas horas empezó a acercar posiciones con la aceitera.

Durante el encuentro, que fue continuidad del diálogo que activó el Centro de Corredores con el intendente la semana pasada, las partes analizaron el estado de situación de la cadena y se pusieron al tanto de las últimas novedades que llegan desde la empresa.

Javkin se mostró muy interiorizado y comprometido con lo que está ocurriendo con Vicentín. Se mostró preocupado por el impacto en la economía regional de la parálisis de la firma y comentó que está al tanto de que en el norte provincial la situación aún es más angustiante.  

El intendente recomendó a la Bolsa afinar las gestiones no sólo con el gobierno provincial sino con el ministro de Agricultura de la Nación Luis Basterra, a quien calificó de accesible y dialoguista. Se comprometió a tender lazos y hacer las gestiones que les encomienden.

Sobre la posibilidad de instrumentar alguna medida de apoyo a la cadena por parte del Banco Municipal, dejó abierta la posibilidad pero le bajó el tono argumentando que la entidad crediticia local no tienen el tamaño como para enfrentar un caída de tal magnitud. Igual, comentó que el Banco trabaja con muchos corredores de la región y que tendrán toda la asistencia que necesiten de la entidad. Y hablando sobre los acreedores de Vicentín, a Javkin comentó el escaso margen de maniobra del Banco Nación (que le prestó u$s310M a la aceitera) por lo apretado de sus cuentas, un comentario que no pasó desapercibido a los hombres de la Bolsa.

Ahora que las nuevas autoridades de municipios y provincia se están terminado de acomodar en los cargos, empieza a tomar temperatura el impacto de la parálisis de Vicentín no sólo en la cadena comercial sino también en las economías regionales y las cuentas públicas. Por caso, el grupo es uno de los principales contribuyentes de tributarios de la provincia. Y la falta de actividad en la planta de San Lorenzo afectará la recaudación por DREI  y las tasas de ingreso de camiones que cobra la intendencia del Gran Rosario.