Cómo es el iPhone que se vende por más de 100.000 dólares

Aparecido hace algunas semanas, el Solarius Zenith Full Gold de la empresa Caviar es el teléfono más caro del mundo. Los más de 100.000 dólares que hay que desembolsar para conseguirlo no se justifican por sus especificaciones técnicas. De hecho, tiene la misma ficha que un iPhone 11 Pro: procesador A13 Bionic, cámara triple en la cara posterior, y sistema operativo iOS 13, entre otros ítems.

¿Cómo se explica, entonces, que al cambio actual (sin contar impuestos) un smartphone tenga un precio que ronda los 6 millones de pesos? Como es habitual en este tipo de productos, la explicación hay que buscarla en los aditivos estéticos y no en las capacidades tecnológicas.

Un smartphone de 101.280 dólares

Ese es, exactamente, el precio base del excéntrico equipo que creó la empresa rusa Caviar. Según dicen, incluye a los “materiales más valiosos de la tierra”. Y suman esta extravagante descripción: “Igual que la atura del sol toma la posición más alta en el cielo, el propietario de este teléfono es digno del estatus más alto”.

En concreto, esta variante del iPhone incluye 750 piezas de oro de 24 quilates y diamantes amarillos. Además, en la cara posterior reluce una pieza de relojería avanzado, un mecanismo que en su interior tiene 19 piedras preciosas.

Los que estén dispuestos a pagar semejante cantidad de dinero por un teléfono pueden optar, en este caso, por un iPhone 11 Pro de 5.8 pulgadas o bien un 11 Pro Max, que crece hasta las 6.5 pulgadas.

La versión más onerosa (el modelo más grande, con 512GB para almacenamiento interno) asciendo a los 120.000 dólares. Además del precio, todos esos aditivos tienen una consecuencia evidente: de los cerca de 180 gramos que pesa un iPhone original, esta variante asciende a cerca de medio kilogramo.