El futuro de las profesiones en Ciencias Económicas

Un mundo globalizado y complejo, sectores de negocios altamente dinámicos, escenarios económicos hipercompetitivos, la incorporación de tecnologías disruptivas, y la transformación digital que nos atraviesa están produciendo modificaciones significativas en la naturaleza de los trabajos y en las prestaciones de los servicios profesionales.

La reconversión es clara, se reemplazarán tareas y puestos de mano de obra intensiva por otros que requerirán habilidades blandas, trabajo en equipo, pensamiento crítico, perspectiva global, creatividad, desestructuración, innovación, células de proyectos y otras formas no habituales de trabajo, que demandarán procesos de adaptación veloces y abruptos.

La necesidad de resiliencia es alta y la proyección hacia el futuro requiere un cambio en las tareas que desarrollan los profesionales, los servicios que ofrecen, la forma en que los brindan y la estructura organizacional de los estudios contables y consultoras tradicionales.

Las tecnologías impactarán sobre diversos aspectos de la labor profesional como ser: migración de pruebas selectivas y sustantivas a mapas de riesgo, desaparición del soporte papel, transacciones y registraciones virtuales, planes de cuentas unificados por sector de negocios, información contable compartida con distintos usuarios, sistemas de autoliquidación de tributos, intercambio de información fiscal con otros países, seguridad de la información, inteligencia de negocios, sistemas predictivos, clusters de empresas, sistemas de cobranzas, pagos e inversiones digitales, blockchain, y documentos encriptados, por solo nombrar algunos de los más relevantes.

Es imprescindible que los profesionales tengan en cuenta, entre otros, aspectos como: inversión en desarrollos informáticos en sus propias estructuras; uso de tecnología para ampliar el alcance geográfico de los servicios; capacitación en utilización de las TIC; integración con profesionales de otras disciplinas; incorporación y uso de la nube como interfaz para el servicio a los clientes; desarrollo del pensamiento crítico; trabajo colaborativo; migrar de trabajos operativos al análisis y resolución de problemas; capacidades de negociación y el desarrollo de redes de estudios para abordar trabajos multidisciplinarios.

También se impone una reconversión de cara a los clientes a quienes se les deberá ampliar sensiblemente la oferta de los servicios tradicionales incorporando: contabilidad de gestión; análisis de costos; evaluación de eficiencia operativa; inteligencia de negocios; planificación tributaria; presupuestación y seguimiento económico financiero; sucesión en empresas familiares; implementación de sistemas de gestión de calidad; programas de responsabilidad social; informes financieros integrados; sistema de información para la gestión; análisis estratégico; planificación comercial; internacionalización de los negocios; formulación y evaluación de proyectos de inversión; reorganización de empresas; reingeniería de procesos; compliance y transparencia; entre algunas de las áreas actualmente menos desarrolladas; así como nuevos servicios que surgirán en un futuro mediato al ritmo del cambio de las necesidades del mercado.

Entender que se trata de desaprender y volver a aprender en un ciclo permanente, junto al desarrollo de habilidades blandas y la reestructuración de la oferta de servicios manteniendo una perspectiva global, los colocará en un lugar de privilegio.