Arrancó con una granja, tiene un frigorífico modelo y ahora vuelve al barrio

Lo que empezó en 1998 como una distribuidora de alimentos se convirtió 20 años después en una de las industrias avícolas más grandes de Latinoamérica. Con sus inicios en Rosario, en 2011 montó en Ramallo un frigorífico modelo donde hoy procesan 140.000 kilos de carne de aves por días, y ahora idearon un nuevo formato de negocios con el que buscan volver al barrio.

Se trata de “el frigorífico en tu ciudad” como decidieron llamar a los locales de venta al público de Frigorífico Mark. El primero abrió en febrero pasado en Uriburu al 1900, muy cerca de donde la distribuidora que dio origen al Grupo tiene sus oficinas centrales. Si bien se trata por el momento de una prueba piloto, la intención es abrir tres más propios y luego salir a franquiciar el negocio.

“Con esto se cierra la cadena. Arrancó Coqui Distribuidora, después se sumó el frigorífico y ahora esta cadena para la demanda intermedia que va a empezar con franquicias de El frigorífico en tu ciudad. El primero está en zona sur y van a abrir tres más entre este año y el próximo, apuntando al emprendedor que tiene un negocio que va a hacer comida en la casa o tiene una rotisería. Pasan, retiran los cajones de pollos y se los llevan directo sin intermediarios”, contó a punto biz Laura Cadeo, quien maneja el diseño de marca de la empresa.

De esta forma, el frigorífico sale directo al consumidor y lo hará con las tres marcas que tienen hoy en el mercado: Pollos Coqui, Don Domingo y Granja San Pedro. Además venderán huevos y pan rallado, es decir los insumos que más requieren quienes se lanzan con un emprendimiento familiar, por ejemplo, fabricando milanesas para la venta.

La caída del poder adquisitivo y la suba de precios fueron factores claves para que el consumo de carne vacuna caiga a 49,6 kilos por persona en el primer trimestre de este año mientras en 2013 era de 59,8 kilos de carne per capita.

Esta transferencia impacta en la venta de pollos y cerdo, por eso el sector avícola se encamina a batir récords históricos de venta. Incluso, desde el sector advierten que las tradicionales parrillas comienzan a dejar paso a los parripollos, que hicieron furor a mediados de los 90.

Roberto Domenech, presidente del Centro de Empresas Procesadoras Avícolas (CEPA), explicó en el diario BAE Negocios que "el año pasado el consumo per cápita de pollo fue de 43 kilos y en 2019 crecerá dos kilos y medio más y será un récord histórico", datos que aportan una base sólida para el negocio que encaró el frigorífico.