Se lanzaron a fabricar un producto que importaban, y ahora salen a venderlo

Con más de 60 años de trabajo continuo en el rubro de la construcción, la rosarina Ribron Estructuras, nacida en la década del 50 en Rosario, decidió apostar a la producción nacional y lanzarse a fabricar un producto que sólo ingresaba al país por medio de las importaciones. Así fue como la empresa se consolidó como productora de andamios de primera generación y en la actualidad es proveedora de importantes industrias nacionales, a la vez que viene de participar en el armado de obras de trascendencia como el estadio de Torneo de Tenis ATP 250 en Córdoba y el evento de Turismo Carretera en San Nicolás, con la colocación de toda la estructura de tribunas.

Luego de un proceso de expansión que comenzó en el 2004 y para el cual la empresa debió adaptar toda su organización interna, Ribron afianzó la producción de sus andamios de primera generación con los cuales pasó a posicionarse en el mercado a la par de grandes compañías extranjeras que eran las encargadas de exportarlos al país. Fue un largo trabajo para lograr que el producto adquiriera el nivel de competitividad requerido y Gustavo Rinaldi, presidente de la firma, destacó que ya vendieron un porcentaje de su producción a empresas como Cargill y comenzaron a alquilar sus andamios a otras compañías como aceiteras y la importante siderúrgica Acidar.

En cuanto al modelo de desarrollo, Rinaldi contó que su crecimiento fue pausado y fueron incrementando la producción de a poco, para tener control en la inversión. “La realidad es que a nosotros fundamentalmente nos alquilan estas estructuras, entonces cuando yo hago una compra para fabricar los andamios, después los alquilo por un valor que es diez veces menor, por lo que había que ir tanteando el mercado con cuidado”, indicó el empresario y agregó que, para su sorpresa, la demanda los superó gratamente.

En lo que respecta a los ingresos que perciben hoy en día, un 10% proviene de las venta de andamios, mientras que el grueso de capital lo obtienen por el alquiler de los mismos y el montaje. “Si las empresas constructoras tuvieran capacidad de inversión seguramente nos comprarían mucho más, pero por la situación del dólar no pueden hacer una gran inversión entonces prefieren alquilarlos por el tiempo que necesitan y nada más”, remarcó Rinaldi

Entre las últimas obras que Ribron llevó adelante se encuentran: la colocación de tribunas para 18.000 personas en el evento de Turismo de Carretera en San Nicolás, la puesta en marcha del estadio de Torneo Tenis ATP 250 en Córdoba, con tribunas para 5000 espectadores en la cancha principal y 9000 en total sumando dos canchas secundarias, la venta de un escenario a la Municipalidad de Villa Constitución y la fabricación de los andamios colocados en el Monumento a la Bandera, entre muchas otras con las que ya vienen trabajando

Como proyección a futuro, Rinaldi precisó que uno de sus objetivos es empezar a galvanizar el material, que hasta ahora solo tienen pintado, para mejorar su durabilidad y su estética. Por otro lado, tienen como plan incorporar sistemas de encofrados metálicos para hormigón armado, un producto que se esta imponiendo cada vez más dentro de las construcciones. Todo apunta a seguir de cerca las últimas tendencias y mantener sus estándares de calidad que les han sabido otorgar un merecido reconocimiento. ““Estamos apostando al trabajo argentino, a la industria nacional, sustituimos importaciones y eso es un cambio radical que hay que seguir profundizando”.