Las 10 mejores y peores ciudades del mundo para irse a vivir afuera

Unas 72 ciudades fueron incluidas en el prestigioso "Expat City Ranking" que toma en cuenta las opiniones de 12 mil personas que emigraron para residir fuera de sus países de origen.

Según publicó el portal iProfesional, la mayoría de los destinos que fueron seleccionados se ubican en Asia y África. 

Las ciudades fueron calificadas por los encuestados en relación a factores como calidad de la vida urbana, facilidad de instalación, trabajo en la ciudad, así como cuestiones financieras y de habitabilidad.

El ranking de las mejores 10 ciudades para vivir es el siguiente:

1. Tapei
2. Singapur
3. Manama 
4. Ho Chi Minh
5. Bangkok
6. Kuala Lumpur
7. Aquisgrán
8. Praga
9. Madrid
10. Muscat

Los destinos menos amables para instalarse fuera del país de origen son los siguientes:

63. Milán
64. Johannesburgo
65. Stuttgart
66. Dublin
67. París
68. Londres
69. Estocolmo
70. Roma
71. Jeddah
72. Riyadh

En Latinoamérica

Entre las 72 ciudades evaluadas, no aparece ninguna argentina. En este caso, solo hubo tres ciudades latinoamericanas incluidas en esta clasificación.

México es la primera, y logró colarse en el "top 20" de ciudades para emigrar, quedando en el 19° puesto. 

La ciudad obtuvo los mejores resultados del continente en términos habitacionales y de bienestar financiero.

El 73% de los expatriados allí reconocieron que les resultó sencillo encontrar dónde vivir y el 58% encuentran que los precios para mantener una vivienda son razonables.

Santiago de Chile es la segunda latinoamericana que aparece en el  36° puesto. 

Quedó en el puesto 16 a nivel global en cuanto a bienestar habitacional y financiero. Pero los expatriados en Santiago además están muy satisfechos con las oportunidades laborales que consiguen al residir en esa metrópolis sudamericana.

Y por último, la brasileña São Paulo, quedó en el 59° lugar. 

Esta ciudad recibió puntajes particularmente bajos en lo que se refiere a la calidad dela vida urbana y fue la peor en cuanto a estabilidad política. El 66 % de los inmigrantes no está satisfecho con este aspecto.