Lo presentaron como un gran plan de incentivos pero nunca arrancó

El Distrito del Frío nunca terminó de arrancar: desde la ordenanza que se sancionó en el Concejo en julio de 2016 sólo una de cerca de 20 empresas en condiciones de acceder al beneficio, lo logró. Otras dos lo empezaron a tramitar aunque hasta el momento ninguno de los dos expedientes llegó a buen puerto. No sólo eso, sino que la empresa que obtuvo el certificado, lo perdió a los dos meses de habérsele otorgado.

El proyecto había sido autoría del Departamento Ejecutivo y creó un Polo del frío en la zona sudoeste que se enmarcó en la ordenanza de Distritos Productivos preexistente. La misma procuraba una serie de beneficios específicos para el desarrollo del sector, estimulando la radicación de empresas de rubros similares o satélites con dos beneficios tan puntuales como tentadores para las empresas: exención del 50 por ciento del DReI y el total de la TGI por 24 meses. 

Pese a haber sido anunciado con bombos y platillos y como un fuerte impulso a uno de los sectores que identifican a Rosario en el país -la ciudad es el principal polo de la industria de la refrigeración argentina-, a más de dos años de haberse sancionado su funcionamiento hoy es nulo. 

Briket es la empresa que lo tuvo y lo perdió y hoy mantiene una disputa legal con el municipio por ese tema: “En enero de 2017 nos otorgaron el certificado y en marzo nos los quitaron. La razón que nos dieron fue porque dimos de baja un empleado -que renunció- y nunca lo informamos. Sin embargo, una de las cláusulas para acceder era haber incrementado la plantilla de personal y nosotros lo hicimos incluso muy encima de lo que nos exigían”, explicó el gerente financiero de la empresa, Mauricio Salvatierra a punto biz.

Consultados sobre el tema, desde la Secretaría de Producción sostuvieron que el motivo de la baja se debió a que la exigencia era mantener el número de personal y como Briket no cumplió, se decidió suspender el benficio.

A raíz de esto, la empresa realizó una presentación judicial en el Departameto Legal y Técnico de la Municipalidad, en la cual defienden la posición adoptada por la cual aun siguen sin pagar las tasas, posición en la que se piensan mantener hasta enero de 2019 que es cuanndo se les venccerían los dos años del certificado otorgado.

Por otra parte, Metalbo y Electrolux son las otras dos empresas que, ni bien sancionada la ordenanza comenzaron sus trámites para quedar enmarcados en el Distrito y lograr las excenciones de Drei y TGI. Desde el Municipio indicaron que “son muchas las exigencias que tienen que cumplimetar” para justificar las demoras en otorgar el certificado.

Lo cierto es que a dos años de haber comenzado las gestiones, ninguna de las dos empresas obtuvo lo que fue a buscar. Así, sin industrias que hoy estén haciendo uso del beneficio, el Distrito del Frío -que se presentaba como el primero de muchos otros-, es sólo una ordenanza sancionada que falló a la hora de ponerse en práctica.