A Don Satur lo dieron por muerto pero estaba vivito y coleando

Los bizcochitos Don Satur gozan de buena salud. Lejos de las informaciones que en las últimas dieron cuenta del cierre de la panificadora con base de operaciones en Chacabuco, provincia de Buenos Aires, un informe divulgado este martes por la consultora Kantar Panel lo ubica en el top ten de las marcas que crecieron en una coyuntura de bolsillos flacos.

La noticia de la muerte de la panificadora Don Satur se esparció como reguero de pólvora en redes sociales este lunes último. Como ocurre con tantas cosas que caen a uno u otro lado de la grieta, la versión se multiplicó y llegó incluso a medios masivos, pero era falsa.

“Estamos trabajando como siempre, es todo mentira. Nos enteramos por las redes sociales”. Así respondieron directivos de la firma al sitio web “El Canciller”.

Pero el rumor que había empezado con la noticia del cierre de la marca se había transformado en trending topic en pocas horas. Luego, la noticia giró a que en realidad era otra firma la que cerraba y dejaba a 18 trabajadores en la calle. Se trata de la panificadora Maitén, que también se encuentra localizada en Chacabuco y es proveedora de Don Satur, pero dejará de serlo a fin de mes, por una decisión unilateral de rescisión de contrato.

Pero la decisión de cortar con un proveedor -fatal para Maitén- se da en un contexto de gran dinámica para los negocios de Don Satur. Según informó hoy la consultora Kantar Panel, se ubica en 10º puesto de las marcas que más crecen en el mercado nacional. Tras sumar cuatro posiciones, los bizcochitos para el mate figuran en el puesto 44 del ránking general de marcas, con un incremento del 11%. Claro está que ese crecimiento se verifica en un contexto en que sobresalen las marcas “low cost”, en un un contexto problemático para el mercado de consumo.