Cuánto propone invertir TPR para quedarse 15 años más en el Puerto

Terminal Puerto Rosario (TPR) le propuso al Ente Administrador del Puerto de Rosario (Enapro) invertir u$s15 M en la refacción de muelles a cambio que le otorguen 15 años más de concesión de las terminales I y II.

Las conversaciones técnicas arrancaron a principio de año y ahora están bastantes avanzadas. Los papers van y vienen desde el organismo administrador y la empresa concesionaria. Pero, en rigor, el acuerdo se define en lo más alto de la esfera política provincial. Por eso fue importante la reunión reservada que mantuvieron  días atrás el gobernador Miguel Lifschtiz y los dueños de TPR. Encuentro que a los observadores más optimistas les animó a pronosticar que, si no aparecen imprevistos, el acuerdo puede sellarse en 60 días.

La concesión a TPR arrancó en 2002 y vence en 2032, pero el nuevo accionista mayoritario (Vicentín 70%) llegó en 2009 y, según su lectura, recién hacia 2014 (dos años antes había ingresado como socio la chilena Ultramar) empezó a poder equilibrar la empresa del desorden institucional y operativo heredado, y por eso sostiene que necesita 15 años más para que el puerto local logre concretar toda su potencialidad.

Además, hay otras razones financieras con las que TPR argumenta la necesidad de extender la concesión. Hasta ahora todas las inversiones se hicieron con capital propio aportado por los accionistas. Pero para afrontar las mega inversiones de fondo que se requieren para el desarrollo del puerto (muelles) deben recurrir a financiamiento. Y con más plazo de concesión se pueden obtener mejores condiciones y además tienen más plazo para amortizar esas millonarias inversiones.

En ese contexto, punto biz pudo saber que TPR está ofreciendo u$s 15 M para reconstruir el muelle sur (el principal que hoy tienen y se utiliza para contenedores). Como esa obra demanda unos u$s30 M de inversión, la propuesta es que el Enapro aporte los otros u$S15 M vía descuento de canon. Eso no supone para nada una descapitalización del ente, que producto de la normalización del pago de TPR en manos de Vicentín hoy tiene fondos acumulados por más de u$s20 M.

Concretada esa inversión, según la propuesta de TPR, todas las obras complementarias extra que se demanden (plazoletas de contenedores, zonas de maniobra, depósitos, ingresos) se harían bajo la fórmula pari-passu entre TPR y el Enapro; es decir por cada u$s1 que aporte uno el otro deberá desembolsar la misma cifra. A esa fórmula también se recurrirá cuando se decida la inversión para reacondicionar estructuralmente los otros dos muelles (centro y norte).

La aceptación de esos términos por parte del Enapro zanjaría el debate sobre si las obras de refundación de los muelles (que prácticamente nunca recibieron inversión estructurales) entraban o no dentro de los compromisos de inversión que tenía el contrato original de concesión. Si este acuerdo se sella, tanto Enapro como TPR habrían coincidido con que esas obras no estaban previstas en la concesión.

Según la propuesta de TPR, el desarrollo de la zona sur del complejo portuario (desde Servicios Portuarios al sur) va por un carril independiente de la negociación por la extensión de la concesión. Es que para esa zona, el Enapro -con los concesionarios- definirán primero un plan rector y además deberán buscar financiamiento del gobierno nacional ya que allí la inversión que se demanda es gigantesca porque hay que construir todo desde cero y liberar el predio de villas.