El Gobierno le pone el ojo a la importación de lentes ilegales

Con el objetivo de contener las importaciones en algunos sectores y combatir la ilegalidad, el Gobierno ordenó en las últimas horas a las bodegas de todo el país que informen en el etiquetado el origen de vinos, y en paralelo, se estableció el primer control sobre la calidad de los anteojos y armazones.

Asimismo, la Secretaría de Comercio presentó un reglamento técnico para la comercialización de radiadores de aluminio para calefacción. La medida busca proteger a consumidores y aumentar la competitividad de la industria, indicaron desde el área encabezada por Miguel Braun.

En cuanto a la procedencia de los vinos, fuentes de la industria alimenticia señalaron a BAE Negocios que "las bodegas ahora deberán informar a los consumidores en el marbete o etiqueta, si el vino es importado, luego de la protesta de productores por el ingreso de millones de litros desde Chile". El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) obligó a comunicar el origen ya que las compras a Chile desataron una gran polémica en la industria vitivinícola nacional. Según datos del INV, durante los primeros siete meses del año ingresaron al país 55,5 millones de litros a granel.

A su vez, desde la Cámara Argentina de Industrias Ópticas y Afines (Cadioa) detallaron que por primera vez, el Anmat trabajará para instrumentar regulaciones en anteojos y armazones en la Argentina. El presidente de la entidad, Norberto Fermani, recibió la novedad durante la celebración de los 25 años de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) realizado en la Academia Nacional de Medicina. Carlos Chiale, administrador nacional del organismo, confirmó que habrá regulaciones que prohíban la comercialización de anteojos y armazones ilegales, potencialmente riesgosos para la salud visual.