Cuáles son los planes de la empresa líder que la rosarina Bioceres compró en Pergamino

Bioceres, la empresa de investigación científica enfocada en la agricultura que tiene base en Rosario y cuyos accionistas son unos 200 de los principales productores y empresarios argentinos, compró a fines del año pasado la pergaminense Rizobacter, una de las líderes en el mercado de insumos agrícolas en el país. Hace pocos días, Punto biz dialogó con su presidente, Ricardo Yapur, para hacer un balance de este primer tramo del vínculo, y saber qué puede pasar con la compañía en los próximos años.

El que sigue es un resumen de la entrevista realizada en Pergamino.
 

En octubre pasado, Bioceres compró el 50,01% de Rizobacter. ¿Qué cambio para la compañía desde entonces?
Nada. Ya llevamos casi 8 meses de trabajo en conjunto y no cambió nada. Federico Trucco, el CEO de Bioceres, no va a cambiar. Y yo tampoco. “Nosotros nos sumamos al éxito de Rizobacter”, me dijo él cuando arrancamos. Y así viene funcionando todo… sobre ruedas.

¿Por qué una empresa enfocada en el desarrollo científico aplicado a la agricultura, como Bioceres, compra una compañía como la de ustedes?
Hay muchas sinergias potentes entre ambas y, además, ellos tienen un plan de crecimiento fuerte para el cual necesitan volumen de negocio, y nosotros aportamos una facturación anual superior a los 100 millones de dólares.

¿Qué significó para ustedes esta operación?
Se fueron accionistas que resultaban conflictivos y hoy tenemos un socio que nos ayuda a generar negocios. Eso es muy positivo. Bioceres nos va a llevar a segmentos en los que no estábamos, como la venta de semillas.

¿Qué tendrán de nuevo en ese aspecto?
Bioceres está trabajando fuerte en el desarrollo de soja y trigo tolerante a sequía y nosotros somos fuertes en los desarrollos a partir de microorganismos, entre otras cosas. Hay una complementariedad muy grande entre nuestros productos y programas, que aportará buenas soluciones para los productores.

¿Cómo se posiciona esta dupla argentina (Bioceres-Rizobacter) frente a un mercado en el que pisan fuerte las grandes internacionales, que además está fusionándose, como Bayer-Monsanto, Dupont-Dow o Syngenta-ChemChina?
Nosotros tenemos un foco bien claro: somos una empresa de productos biológicos. Creemos que lo biológico no va a reemplazar totalmente a lo químico, pero apuntamos a productos más limpios, pensando en una agricultura sustentable.

¿Les preocupa tener como competencia empresas internacionales cada vez más grandes?
No. Nadie sabe bien qué va a pasar con esas fusiones. Por ejemplo, qué pasará con Bayer y Monsanto, y cómo quedará Novozymes, que ahora es de Monsanto, en ese marco. En definitiva, los mercados se acomodan y nadie se quedan con el 100% de nada. Eso solo pasó con la soja RR. A los grandes les cuesta diferenciarse, y en eso nosotros somos especialistas.

Ustedes también tienen una alianza muy fuerte con Syngenta…
Sí, y eso sigue así, más allá del ingreso de Bioceres. Junto con Federico Trucco estuvimos en Basilea, en la sede global de Syngenta, y todos coincidimos en que estamos interesados en profundizar este vínculo estratégico, porque además Bioceres tiene desarrollos que podrían complementarse muy bien con varias cosas de Syngenta. Y nosotros somos la pata comercial de eso.

¿Cuál es el crecimiento que se plantean ahora con Bioceres como principal accionista?
Tenemos un plan estratégico que prevé llegar a la campaña 2021/2022 con una facturación superior a los u$s 220 M.