Cerró una histórica panadería y toda una ciudad se conmocionó

"Cuando un amigo se va, queda un espacio vacío". Como en la canción de Alberto Cortez, la ciudad de Villa Constitución se quedó el pasado 31 de diciembre sin la presencia de uno de sus comercios más emblemáticos: la confitería y panadería Yuly, que cerró sus puertas tras 65 años de trayectoria. Durante los últimos días los ciudadanos villenses regaron las redes sociales con mensajes de cariño y afecto, al tiempo que se llegaron hasta el local para llevarse al menos un recuerdo de lo que fue el histórico reducto.

En contacto con punto biz, Norberto Porfiri, uno de los dueños de Yuly, relató que lo vivido en la última semana le hizo dar cuenta de la dimensión que tenía su negocio. "La gente vino a llevarse algo, cualquier cosa. Desde fotos que se sacaron frente a la puerta del local hasta una persona que me pidió una pinza de recuerdo. La verdad que uno trabajando no se daba cuenta de lo que significamos para la ciudad", contó.

Heredero junto a su hermano Norberto de la panadería que inauguró su padre en la década de 1950, Norberto afirmó que debió bajar las persianas por no encontrar en sus hijos la voluntad de continuar con el negocio. "Toda la vida nosotros haciendo hincapié en que estudien, y se decidieron por distintas carreras que los alejaron de la panadería", dijo.

El local funcionaba desde hacía 65 años en el centro de Villa Constitución, sobre calle San Martín. El paso del tiempo los convirtió en una parada obligada para cada celebración, para cada evento de trascendencia en esa localidad del sur provincial. Se especializaron en "todo lo que estaba en contra de la dieta pero era rico", según palabras de Norberto. Para algunos el sabor era tan especial que hasta compraban postres que viajaban hasta Europa para algún villense que había emigrado. Hubo incluso un político de San Nicolás que todas las semanas pasaba por Yuly antes de viajar a Buenos Aires para llevarse su Milhojas.

La característica principal del local era lo artesanal de sus producciones, puesto que si bien la tecnología había proporcionado mercaderías más duraderas, preferían seguir inclinándose por lo tradicional y casero. Así nació el postre "Emiliano", que incluía Pionono, dulce de leche, merengue y chantilly natural.

"Lamentablemente tuvimos que cerrar. No nos gustó, pero era un momento en el que había que ponerle fin. Estábamos cansados y además lo hicimos para solucionar el tema de la herencia y no dejar ningún problema a nuestros hijos", confesó Norberto.

Cosecharás tu siembra

Los mensajes en las redes sociales no se detuvieron a lo largo de la última semana. "Qué pena… cuántas cosas ricas… cuantos años… una vida…", dijo Liliana, una ciudadana mayor de Villa Constitución. Los recuerdos atravesaron distintas generaciones: “Me acuerdo las medialunas con queso al horno a la salida del boliche. Qué espectáculo!!!”, expresó Maximiliano. Incluso llegaron saludos desde otras latitudes: “Desde Mar del Plata… (un ex colectivero de la 12 de Octubre) recuerdo por las mañanas comprar los mejores sacramentos de mi vida… abrazo nostálgico a tan emblemático negocio de Villa”, afirmó Carlos.

El viernes pasado los titulares de Yuly fueron agasajados en la sede de la Federación Empresaria del Departamento Constitución (Fedeco), donde les reconocieron sus años de trayectoria en el corazón comercial de la ciudad.