El rosarino que es un crack de la percusión y le pone ritmo a los Decadentes

“Estas son las mejores congas del mundo. Y las hacen en Rosario”. ¿Quién lo dijo? Gastón “el francés” Bernardou, el percusionista de los Auténticos Decadentes, cuando tocaron el fin de semana pasado en el Anfiteatro Municipal. Las congas en cuestión son de Late Percusión, un emprendimiento 100% rosarino que arrancó casi por accidente durante un viaje a Brasil y 25 años después sigue dando batalla en un mercado en el que se imponen grandes marcas. 

Emiliano Figge tenía por entonces 18 años y estudiaba batería. Un día agarró la mochila y el primer destino fue Brasil. “Ahí vi unos tamborcitos y empecé a hacer algo similar, aunque muy rudimentario”, le contó a Punto biz sobre su incursión en el rubro. Se nutrió también de otras experiencias en Cuba y Uruguay, donde había mucha movida de percusión, y hace poco más de una década arrancó a fabricar congas. 

“Habrá sido por el año 2006 que le hicimos una conga a Carlo Seminara, de la banda Cielo Razzo, para tocar en Obras. De hecho, la conga es el eje de todas las empresas que fabrican instrumentos de percusión latina. Ese fue nuestro debut y nunca paramos”, confió Emiliano. Hoy, son tres personas que en la diaria trabajan en el taller que Late tiene en barrio Saladillo, aunque por una cuestión de volumen hay piezas que se tercerizan y llegan a 20. 

Figge destaca tres puntos que marcan la diferencia de sus productos: calidad constructiva, calidad sonora y calidad visual. Pasó también por Bellas Artes y ese es un aporte original porque cada cliente tiene la posibilidad de personalizar las congas como más le guste, un distintivo respecto de las demás marcas. Aparte de la plaza local, hoy exportan a Chile y Estados Unidos, y tienen en mente pasar del taller a la fábrica porque ya les está quedando chico. Es que producen en total unas diez congas por mes. 

“Trabajamos en una pequeña fábrica-taller que funciona en la casa de mi abuela. Estamos tratando de hacer reformas y adecuarnos a la par que vamos creciendo porque si bien hay corporaciones muy grandes, tenemos también varias puertas abiertas para traspasar fronteras”, sostuvo el emprendedor. El recorrido fue evolucionando naturalmente y dice disfrutar mucho el proceso, aunque hay que tener ganas y dedicación para hacer caminar un negocio que apalanca sus ventas sobre todo en las redes sociales y el boca a boca. 

Recién ahora están manejando cierto stock, pero siempre trabajaron por pedido. Es que hacer una conga de madera lleva alrededor de nueve meses y un poco menos una de fibra de vidrio, que puede estar lista en 20 días. Además se especializan en bongós y campanas, y están adosando la fabricación de parches sintéticos para elementos de percusión. Otro segmento, dado que hay muy pocas empresas en el mundo que los hacen. 

El camino a los Decadentes 

Emiliano formaba parte de un grupo que hacía festivales de percusión independiente en el Parque España y allí conoció a Mariano “tiki” Cantero, del grupo de percusión Bomba de Tiempo. “Al ‘tiki’ le encantaron las congas y a los dos meses me llamó que las quería. Pasaron cinco años y un día en un negocio veo que los Auténticos Decadentes estaban tocando el unplugged en MTV con nuestras congas. Habían pensado en un formato con mucha percusión para la tele y convocaron a la Bomba de Tiempo. Ellos llevaron las congas de Late y ahí las conoció Gastón”, resumió sobre la anécdota que los acercó al legendario grupo argentino.