Balcarce Café apuesta a la apertura de nuevos locales en Rosario

A la hora de emprender un nuevo negocio, el formato de franquicia suele ser una variante atractiva para aquellos que necesitan disminuir el riesgo. Trabajar bajo el paraguas de una marca conocida, puede ser una ventaja en tiempos de caída del consumo. Y el de la gastronomía es uno de los rubros que mejor se mueven en el campo de las franquicias. Tal es caso de la cafetería Balcarce, prima hermana de la también marplatense Havanna, la cual tiene en carpeta un ambicioso plan de expansión en Rosario.

La tradicional marca de alfajores y postres Balcarce lanzó hace un tiempo una línea de cafeterías gourmet, que ya cuenta con más de 50 locales en todo el país. Presente en Rosario desde 2012, con un coqueto espacio en la esquina de Paraguay y Jujuy, la firma se encuentra en la búsqueda de nuevos franquiciados para pelear fuerte en el competitivo mercado local de cafeterías.

En el misma línea que Havanna o Café Martinez, Balcarce apunta a un concepto de cafetería más elaborada que no se quede en el café y el cortado, sino que presente alternativas más refinadas en capuccinos, cafés especiales y batidos helados, entre otros, inspirados y acompañados por los postres y productos dulces de Balcarce. “Es el paso lógico que debía dar la marca”, comentó a punto biz Pablo Mariani, titular de la franquicia en Rosario.

Mariani habló sobre los requisitos para sumarse al negocio que, asegura, son mucho menos restrictivos y mas flexibles que en otros casos. “Es una inversión relativamente baja, cuyo precio va a variar obviamente según la superficie del nuevo espacio, y según el formato del local”, explica, diferenciando dos tipos locales: por un lado, los del tipo “Góndola Stand”, de baja complejidad operativa y requerimientos, pensados para shoppings y galerías; y por otro, los de mayor tamaño, emplazados en la vía pública, que apuntan a combinar la cafetería gourmet y la venta de productos dulces para llevar.

En cuanto al local, debe partir de una propuesta del franquiciado, que la empresa analizará y luego definirá una aprobación para que se ponga en marcha. “Desde ahí se le va a proveer de un manual de marca y se va a supervisar la obra apoyándola en un 100%, con gráfica, capacitación, un sostén muy fuerte”, explica el titular rosarino. Se trata de un contrato renovable por cinco años, y desde Balcarce aseguran que es una franquicia “muy poco invasiva en cuanto a las decisiones; al franquiciado se lo deja ser”.

Si bien el nicho está poblado de fuertes competidores como Café Martínez, Havanna, Piacere o Starbucks; en Balcarce defienden el costado familiar y artesanal de la marca, "que otras marcas no tienen". Desde el proceso de fabricación hasta el management, se instala como una empresa transparente, con corazón pequeño, y sin una gran escala internacional.

Mariani afirmó que el beneficio de una franquicia de Balcarce Café está en que “es un producto probado, con una referencia aprobada por el público”. Sostiene que la marca tiene una amplia preferencia que asegura un flujo de gente al negocio desde el momento cero, lo que permite trabajar sin incertidumbre, además de que es una marca que normalmente se asocia con “momentos gratos, con la familia, con las vacaciones, y quizás también con una Mar del Plata del pasado”.