El paro por Ganancias paralizó Rosario y la región

Las consecuencias del paro que determinó para hoy la CATT (Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte), en reclamo de la no aplicación del impuesto a las ganancias a los trabajadores, comenzaron a palparse desde temprano en nuestra ciudad. Fue respaldado por la CTA y las CGT Azopardo y Azul y Blanca, y se les sumó una gran cantidad de sindicatos y agrupaciones.

Son principalmente la falta de colectivos urbanos y de atención en las oficinas municipales y bancarias los rasgos mas notorios de la convocatoria, debido a las distintas fuerzas que se acoplaron a la demanda, además de la plena adhesión del transporte de mediana y larga distancia. No se dictan clases en las escuelas públicas, técnicas o las facultades de la UNR, y la atención en los hospitales es restringida, ya que también se adhirieron tanto Trabajadores de la Sanidad (enfermeros) como el Sindicato de Médicos. Las guardias mínimas, sin embargo, están siendo garantizadas en todos los efectores.

En el puerto rosarino no habrá movimiento, ya que los sindicatos de Aceiteros y Dragado y Balizamiento abandonaron sus actividades en la zona. Aguas Santafesinas también se pliega al paro, al igual que la seccional Rosario de ATE y el sindicato Norte, con lo cual se suspendió la normal atención en los distintos sectores de las administraciones municipal, provincial y nacional en los que inciden: organismos como Ansés, Pami, API y Fábrica Militar.


Las industrias de la zona tienen escasa concurrencia, ya que la Unión Tranviario Automotor se encargó de que no haya transporte público de pasajero ni de traslado de trabajadores de fábricas.


La Municipalidad de Rosario recomendó a los vecinos no sacar la basura hasta la noche del martes, cuando retome el servicio de recolección.
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Por su parte, la Corriente Clasista y Combativa organizó cortes en Circunvalación y autopista a Buenos Aires, Felipe Moré y Presidente Perón, Circunvalación y Presidente Perón, Circunvalación y Juan José Paso, y Sánchez Granel y Polledo (en el inicio de la ruta 34), fundamentándose como la única forma que tienen los desocupados para expresarse. De todas maneras, el tránsito no se interrumpió: sólo se evita el paso a vehículos de carga.

Con respecto al impacto del paro en el cordón aceitero y portuario, salvo los puertos de Cargill (Gálvez y Puerto San Martín), de TG (PGSM), Nidera (PGSM), Vicentín (Ricardone), Noble (Timbúes) y Molinos (SL), en el resto no habrá descarga de camiones. Igual, recibidores de granos, estibadores, aceiteros y transportistas se sumaron a la huelga por lo que la actividad es casi nula.

Los que sí trabajan

Hay taxis funcionando en la ciudad, y también funcionan con plenitud las estaciones de servicio, cocheras y lavaderos automáticos. Tampoco adhirieron al paro los Empleados de Comercio; Amsafe y Sadop; trabajadores telefónicos, metalúrgicos, automotrices y de peajes; empleados judiciales provinciales (aunque sí los trabajadores de la Justicia Federal) y estibadores portuarios. Abrieron con normalidad los centros comerciales, supermercados y la mayoría de los comercios en general.