Cómo prevenir la tartamudez para lograr una comunicación fluida

Cuando los niños comienzan a hablar, en la etapa que se extiende entre los dos y los cinco años, suelen mostrar disfluencias que forman parte de la evolución del lenguaje. La comunicación no fluida muestra manifestaciones alteradas durante la comunicación y según la manera en que sean percibidas por el entorno familiar dificultarán o facilitarán la interacción comunicativa. Así lo sostienen desde la Fundación para la Tartamudez de Rosario.

Puede ocurrir que estas dificultades se perciban como “error”, es decir por fuera del “deber ser” provocando tensión en la comunicación familiar, al tiempo en que si la atención se pone en el habla del niño, genera reacciones tanto verbales y no verbales que condicionan la comunicación en su totalidad. Tomando la reflexión de Johnson ( teoría diagnosogénica) sobre el origen de la tartamudez…:“La tartamudez comienza en la cabeza de los padres antes que en la boca del niño”.

En los niños pequeños la espontaneidad para comunicarse es una cualidad inherente a ellos y empieza a perderse con la mirada y actitud comunicativa de su entorno familiar Es en ese momento donde comienza a alterarse no sólo la espontaneidad comunicativa del niño que trata de que no le sucedan “esas trabas porque está mal”, sino también la espontaneidad de los padres y personas más cercanas al niño al sentir ansiedad , preocupación y exigencia por la forma de hablar del niño.

Este y otros temas son abordados por la Fundación para la Tartamudez, una entidad sin fines de lucro con quince años de experiencia en la problemática de la Comunicación Fluida en Rosario. Compuesta por un equipo de profesionales relacionados al área de la salud, la fonoaudiología y la psicología, la Fundación se dedica tanto a la formación y a la investigación, como a la prevención y a la asistencia de personas tartamudas y familiares.

Capacitación dirigida a profesionales de diversas disciplinas interesados en la temática: fonoaudiólogos, psicólogos, psicopedagogos, musicoterapeutas, etc. El mismo comienza el 10 de abril y finaliza el 27 de noviembre.

La metodología de trabajo es práctica, teórica y vivencial. La modalidad es grupal, y dadas las características vivenciales de las tareas, el cupo es limitado. La capacitación apuesta a que los asistentes, puedan adquirir habilidades profesionales para realizar un abordaje clínico de los vínculos y contextos en los que se mueve una persona que tartamudea y su familia, desde una concepción del hombre como totalidad.