Cerámica Alberdi ya tiene el camino libre con el Municipio para una millonaria inversión

Cerámica Alberdi SA ya tiene el camino libre con la Municipalidad de Rosario para poner en marcha un ambicioso plan de inversiones que ampliarán la capacidad de la planta que tienen en la zona norte de la ciudad.

En efecto, la intendenta Mónica Fein presidió ayer la firma de un convenio con la empresa por el cuál ésta se c ompromete a donar al dominio público municipal el terreno necesario para la apertura de la calle Calfucurá ya que  actualmente parte del predio de la firma. En concreto,  permitirá la ejecución de trabajos para prolongar esa arteria a lo largo de 300 metros hacia el oeste de Molina hasta Camino de los Granaderos.De esta manera, y teniendo en cuenta que en ese tramo el ancho de la calle Calfucurá alcanzará los 16 metros y su extensión 300, la donación alcanza los 6.000 metros cuadrados. Esta obra permitirá optimizar la vinculación de barrio La Cerámica con su entorno inmediato hacia ambos lados de la avenida Camino de los Granaderos, brindando mayor seguridad y conectividad a los vecinos.

La donación es parte de la compensación que le pidió a Cerámica Alberdi para autorizar cambios edilicios que encarará como parte de una  importante ampliación y modernización de sus instalaciones, entre las que se contempla la incorporación de mejores condiciones de seguridad medioambiental.

Participaron de la firma del convenio los secretarios de Gobierno y de Hacienda y Economía, Fernando Asegurado y Verónica Irízar; el subsecretario de Planeamiento, Eduardo González; la vicepresidenta del Servicio Público de la Vivienda y el Hábitat, María Inés Capón; y el apoderado de la empresa Cerámica Alberdi, Enrique Gatti.

Tal como publicó punto biz, la planta de Rosario de Cerámica Alberdi pasó a ser controlada por los mayores productores de ladrillo hueco del país. Se trata de las empresas Latercer y Ladrillos El Palmar quienes crearon una nueva sociedad, Cerámica Rosario SA, y comparten el 50% del paquete accionario con los dueños originales de la fábrica local. El gerenciamiento también pasó a manos de los nuevos inversores. El complejo industrial está aún parado, y por estos días los flamantes accionistas realizan tareas de ampliación e instalación de nuevos maquinarias, como parte del acuerdo alcanzado con la empresa familiar que hasta el 31 de diciembre comandó los cuarteles de Rosario de Cerámica Alberdi