Tarjetas: qué pasará con los precios si rebajan las comisiones

Este viernes el Gobierno nacional anunciaría un acuerdo con los bancos, los comercios y las tarjetas para rebajar las comisiones en las de crédito y débito de cuatro a cinco años después de que fracasaran las negociaciones en el Congreso de la Nación.

Según trascendió, la disminución irá del actual 3% al 1,8% para las tarjetas de crédito y del 1,5% a 0,8% para las de débito en un plazo que iría de cuatro a cinco años.

La gran incógnita es si la reducción se reflejará en el precio que pagan los consumidores y luego si se necesita una ley para la definición formal de las nuevas comisiones. El presidente de Came, Osvaldo Cornide, confirmó que están avanzando en un acuerdo con el Banco Central (BCRA) para implementarlo.

“Nos preocupa el costo de las tarjetas de crédito, ya sacamos dos leyes bajando las comisiones y el año pasado teníamos otra que se frustró. Ahora, trabajando con el BCRA, hemos llegado a un acuerdo dónde se rebajarían tanto las comisiones de tarjetas de débito como de crédito”, dijo a la agencia Télam tras la inauguración del XI Seminario Internacional de Centros Comerciales a Cielo Abierto (CCCA).

Cornide enfatizó el compromiso por la rebaja de los aranceles de las tarjetas de crédito y débito, y aseguró que continúa el diálogo con diputados, senadores y el gobierno nacional: “Estamos cerca de un acuerdo”, adelantó.

El objetivo es que las comisiones que se les cobra a los comercios pasen del 3% actual al 2,5% para tarjetas de crédito este año, y luego al 2,35% en 2018, al 2,15% en 2019, al 2% el año siguiente y finalice en 1,8% en 2021. La baja progresiva también se aplicaría en el caso de las tarjetas de débito: el arancel (hoy en un 1,5%) bajaría a 1,2% en 2017, y luego de forma progresiva hasta el 0,8% desde 2021 hacia adelante, reveló el portal Infobae.

Si bien es cierto que la rebaja en las comisiones no tiene impacto directo en los precios al consumidor, los comercios tienen el beneficio antes de gastos financieros para los comerciantes, con lo cual podrían trasladar la rebaja a los productos. "Al aumentar sus ganancias podrán invertir más y hacerse más competitivos. Y si bajan los aranceles, ayuda a bancarizar la economía", justificaron fuentes de Producción al portal Infobae.