La diseñadora rosarina que coló sus carteras en los eventos más top

Miroslava Duma es una bloguera de origen ruso, que impone las últimas tendencias de la moda en aquel país. Todo aquello que comparte en sus redes sociales es lo que las rusas corren a comprar. Para Emilia Scheinfeld, fue la inspiración para el nombre de su marca pero también para un modelo de negocios: promocionar sus productos mediante “influencers”, modelos y famosas - con cuentas de Instagram que rebalsan de seguidores-, y que se toman una foto con sus productos. Hoy sus creaciones, no pueden faltar en los eventos más chic de la movida porteña. 

El emprendimiento arrancó en 2013 cuando, para un trabajo de la escuela de diseño, tuvo que armar una serie de carteras para un desfile. Esas primeras creaciones la impulsaron a crear un negocio que contaba con tres modelos básicos a los que se podía personalizar eligiendo colores y cuerinas. Al año siguiente, y con la impronta de llevar adelante modelos exclusivos, no renovando stock, la marca se fue profesionalizando.

Desde hace un tiempo, Myroslava comercializa a mayoristas ubicados en distintos puntos del país: Capital Federal, Tucumán, Mendoza y Córdoba. Los pedidos particulares desde la web de la marca, que funciona desde agosto del 2016, llegaron también desde Chile y Uruguay, pero por ahora el emprendimiento se concentra el país.

La marca se vende en la ciudad en locales multimarcas pero donde más alcance tiene al público es en su showroom ubicado a cuatro cuadras de Bv. Oroño, en Pasaje Piñero García 2685.

“Diseño productos clásicos, que arriesgan con colores y estampados. Arranqué en un primer momento con los sobres, me interesaron porque me gusta jugar con las figuras, con las sombras y los colores. Actualmente, y en conjunto con las mochilas, son lo que más se vende, y todas son de eco cuero, cruelty free”, contó Emilia a punto biz.

Actualmente, Myroslava está en proceso de búsqueda de una agencia de publicidad que siga llevando a cabo la tarea de redes sociales y diseño gráfico, para dar impulso a la marca. “Ante el aumento de demanda necesito poder delegar ciertas cuestiones, para poder centrarme en lo que me interesa, crear”, contó Emilia.