Qué pasó en el encuentro entre Macri y Cristina en Olivos

Había mucha expectativa puesta en el encuentro de ayer entre el presidente electo, Mauricio Macri, y la mandataria saliente, Cristina Kirchner. Tras la victoria, el macrismo no habían querido aventurarse a dar detalles de la conformación y medidas que tomarían al asumir como nuevo gobierno hasta tanto no comenzara formalmente la transición y conocieran la herencia que les dejaba el kirchnerismo. Pero después de la reunión que mantuvieron ayer ambos mandatarios, quedaron más dudas que certezas en torno a la posibilidad de un pase ordenado y políticamente correcto.

Los que esperaban ver hoy en los medios la foto oficial e histórica de Cristina felicitando a Macri, deberán esperan al 10 de diciembre, día en que la Presidenta le prometió al jefe de gobierno porteño “que todos sus ministros estarán a disposición para informarle sobre cualquier cuestión que quieran saber”, pero no antes, según indicaron voceros del Pro.

Ayer, la mandataria tampoco dio lugar a otros planteos de fondo y se limitó a felicitarlo y a confirmarle que estará presente en el Congreso para la ceremonia de traspaso, pero se negó a ponerle a disposición los número de su gestión.

Anoche Macri, visiblemente decepcionado evaluó que la reunión “no valió la pena”. Apenas pudo comunicárselo a los medios que se agolparon en la entrada de la Quinta porque ni siquiera logró convencerla de que habilitara la sala de prensa para dar detalles del encuentro que duró sólo 20 minutos y fue a puertas cerradas. 

Esta mañana, desde el oficialismo salieron a dar su versión opuesta. El jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, en su habitual encuentro con los periodista en Casa Rosada afirmó que fue Macri quien no tuvo “vocación” de realizar una “transición” hasta asumir el cargo, sino de hacer un “‘showcete’ televisivo”.

“No han tenido vocación de hacer una transición. Si la vocación es hacer una transición para las cámaras, porque la intención es hacer un ‘showcete’ televisivo, no es nuestra vocación.Queremos aportar datos, pero sin este gesto de chiquilines”, criticó el ministro coordinador, en su habitual contacto con la prensa en la Casa de Gobierno.

Allí, refirió que él mismo convocó a su sucesor en el cargo, Marcos Peña, pero que el dirigente le pidió que fuera un encuentro “público”, por lo que ironizó: “No estoy citándolo en un bar en Pompeya, sino en mi despacho”, para proporcionarle información relacionada con el área.

Hace apenas unos días atrás, tras conocerse que Macri sería el sucesor de Cristina, el senador nacional por el kirchnerismo Juan Manuel Abal Medina había asegurado que iba a haber una “transición totalmente correcta” entre la Presidenta y el próximo gobierno y enfatizó que “el peronismo va a trabajar para garantizar la gobernabilidad”.

Sin embargo, no parece ser ese el escenario.