Hizo la ropa para su bebé, creó una marca y abrirá un local

Yanina Perigo tiene 35 años y es Licenciada en Comercialización. Se convirtió en madre hace seis y allí fue cuando se aventuró a hacer ella misma la ropa para su primera hija. De lo que comenzó como un hobbie nació una marca que ya viste a niños de todas las edades con prendas que fusionan calidad, utilidad y diseño de autor.

“Yo ya tenía las máquinas y me tiré a probar. Hice un curso de costura, empecé a hacer ropa para mi nena y después algunos amigos que tenían bebés de la misma edad empezaron a pedirme que también haga para ellos”, comentó Yanina en comunicación con punto biz. Al ver el resultado, se lanzó a aprender moldería para poder producir sus diseños en mayor cantidad, con la idea de seguir creciendo. “Todo fue progresivo, casual, no estaba planeado”, explicó, quién ahora está detrás de Telma y Telmo, una marca que produce ropa para niños de 0 a 12 años.

Sus primeros pasos al público los hizo en 2011 en la feria Cooltura, en Roca y el río, donde consiguió tener más rotación, y en la que aún se presenta. Para eso, experimentó por primera vez el tener que producir a un nivel de stock más grande, con más talles y tipos de prendas. Ahora no solo diseña, hace los cortes y prepara los moldes, con ayuda de su marido, sino que vende en cantidad en la feria y a través de los contactos que llegan por su espacio en Facebook. Tiene también su propio showroom, a donde recibe mediante citas a los interesados.

Telma y Telmo ofrece calzas, joggings, shorts, bermudas, polleras, vestidos, tapados, buzos, canguros, camperas, remeras, chalecos y muchas cosas más, para niños de todas las edades y desde recién nacidos, usando friza, polar y jersey, principalmente. Incluso comercializa tutús que, según la emprendedora, “vuelven locas a las nenas, y los piden mucho”. La premisa de la marca está en “no dejar de lado la calidad”, pensando en que la ropa “no se rompa cuando los chicos juegan, corren y se arrastran por el piso”, aseguró Yanina, agregando que la base está en hacer ropa “de diseño y para todos los días, pero resistente”.

La estrecha relación con otras madres, y el hecho de haber dado a luz hace un año a su segunda hija, es de alguna manera el motor para nuevas creaciones. “En función de lo que veo que ellos necesitan voy sacando nuevos diseños. Además, la gente me cuenta qué es lo que están buscando para sus hijos y no consiguen en los negocios, y yo armo algo a partir de eso. Me gusta buscar diferenciarme de lo que se consigue en el centro o en un shopping”, manifestó Perigo.

Pronto, el showroom de Telma y Telmo (ubicado en calle Urquiza, cerca de la terminal) abrirá al público como un local, mientras esta emprendedora por accidente sigue ampliando sus ventas y expandiendo el negocio en el que convirtió a su hobbie.