La pelota santafesina tiene nuevo lugar de origen

Desde hace más de 20 años que en Santa Fe no se fabrican pelotas cosidas para uso recreativo, pero en la localidad de El Trébol apostaron a romper esa racha, a partir de una iniciativa patrocinada por la Intendencia. Mediante un convenio con una talabartería el municipio financia la capacitación en un oficio artesanal que -según se asegura- tiene demanda firme. Lo primeros modelos destinados a la práctica de fútbol, voley y handball ya están listos.

“La última empresa dedicada al rubro funcionó en Las Rosas pero cerró hace dos décadas. La idea busca revitalizar la actividad que es rentable debido a que las pelotas con cocido artesanal siguen estando a la vanguardia en durabilidad. Pensamos aprovechar la falta de modelos importados que destruyeron la producción nacional para revertir el proceso”, le cuenta entusiasmado a punto biz Alberto Leguizamón, talabartero de profesión y uno de los artífices del proyecto.

La propuesta intenta plasmar un movimiento como el que se gestó en Bell Ville, Córdoba. Allí, de la mano de un par de firmas que resistieron la crisis de los 90, la fabricación de pelotas se reactivó con varias marcas que hoy venden a nivel nacional y en el extranjero.

La Municipalidad de El Trébol es quien financia la compra de los insumos y sostiene la formación de quienes se han interesado en la variante de trabajo. “Yo aporto la maquinaria de mi taller y tenemos una nutrida línea ya definida: la tradicional pelota número 5, la número 4 de 12 gajos, de voley  y la última lanzada, la de handball”, enumeró Leguizamón sobre las novedades.

“Pese a las innovaciones en materiales y composición, la pelota cosida a mano sigue siendo la de mayor calidad para un uso intensivo, por lo tanto pensamos que es posible articular un ejército de emprendedores que puedan generar sus propias marcas. Por lo pronto tenemos las pelotas municipales que serán destinadas en primer lugar a iniciativas de acción social y a clubes locales, pero estamos pensando de qué manera integrarlas al mercado comercial, fundamental para acaparar rentabilidad”, puntualizó.