Cinco edificios de Rosario que son íconos de la construcción sustentable

La ciudad de Rosario, con una fuerte impronta en el sector de la construcción, cuenta con proyectos que lograron la certificación “Leadership in Energy & Environmental Design” (Leed) que otorga el Green Building Council, la cual garantiza el sello de calidad y sustentabilidad al más alto nivel.

Se trata de cinco obras que obtuvieron la exclusividad de este sello, que no sólo mide el resultado final, sino además el proceso de construcción sustentable sobre el cual fue realizado el edificio. 

Además del aporte en el camino a promover una economía sustentable, contar con una certificación Leed suma números beneficios económicos, basados en el ahorro del consumo energético y de uso del agua del orden del 30% al 50%, así como una reducción sustancial en el nivel de residuos en el proceso de ejecución del proyecto. Todo esto contribuye además a un mejor rendimiento y productividad en la obra, eficientizando tiempos y eficientizando costos.

El primero en obtener la certificación internacional fue el edificio Nautilus, ubicado en Buenos Aires y Pellegrini, lo hizo en 2019 con la categoría “Gold”; una de las más altas que otorga el Green Building Council.

En ese mismo año la sede de Citibank de Presidente Roca 740 consiguió su sello Leed y en 2020 la Caja Mutual San Cristóbal, ubicada en Santa Fe 1846, obtuvo la categoría Gold. Mientras que este año el edificio Armonía, de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), ubicado en calle Corrientes 730, ganó su certificación con la misma categoría.

Por su parte, la aseguradora Sancor Seguros obtuvo la certificación Leed de Plata por la obra realizada en su edificio corporativo de 8.500 metros cuadrados ubicado en la localidad de Sunchales, marcando un precedente en el rubro de las aseguradoras, ya que en 2021 la compañía La Segunda obtuvo la máxima categoría, Leed Platinum, con su edificio corporativo ubicado en la intersección Ruta A012 y Autopista Rosario-Buenos Aires.

El edificio de La Segunda se convirtió en el segundo más sustentable del país. Un conjunto de innovaciones le valieron ese título, entre las que se destacan el uso de energía térmica del subsuelo para mejorar la temperatura del aire; posee pisos refrescantes para reducir el consumo de energía eléctrica; cuenta con plantas potabilizadoras alimentadas por energía solar y eólica, así como paneles solares que generan el 13% de la electricidad del edificio y un reservorio especial que recolecta el agua de lluvia para abastecer a los sanitarios del edificio.

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